El Gobierno de Sao Paulo informó este jueves que CoronaVac, la vacuna contra el covid-19 que desarrolló la empresa china Sinovac Biotech, registró un nivel de eficacia de 78 %, según pruebas realizadas en Brasil.
"Hoy es un día muy importante para Brasil, para la vida y para la salud. La vacuna del Instituto Butantan tiene una eficacia de 78 a 100 % contra covid-19, apuntan los estudios brasileños", dijo el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, durante una rueda de prensa colectiva con investigadores y desarrolladores de la vacuna.
Doria aseveró que estos resultados se traducen en que el medicamento tiene "elevado nivel de eficiencia y eficacia para proteger la vida de los brasileños".
Según anunció, se tiene previsto que la inmunización en Sao Paulo comience el próximo 25 de enero, un mes antes que en el resto del país.
En el país suramericano, la CoronaVac empezó a ser producida desde diciembre por el Instituto Butantan, centro brasileño dedicado a la investigación en el área biológica, que tiene un convenio con la farmacéutica china.
Pruebas anteriores
La vacuna ha sido aplicada en seres humanos con casos leves de covid-19, como parte de la tercera y última fase de pruebas.
Los resultados fueron enviados a la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), que es la encargada de autorizar su uso en el país y fueron revisados en Austria por el Comité Internacional Independiente, que ha acompañado el proceso, recoge Folha de Sao Paulo.
Tras la presentación del informe, el Instituto Butantan pide que su uso de emergencia sea autorizado por Anvisa.
Los ensayos comenzaron el pasado 20 de julio con 13.000 trabajadores sanitarios voluntarios de ocho estados brasileños, que recibieron dos aplicaciones con catorce días de diferencia.
En noviembre pasado arribó a Sao Paulo el primer cargamento con un total de 120.000 dosis de CoronaVac. El acuerdo entre el estado brasileño y Sinovac contempló la compra de 46 millones de vacunas y los insumos necesarios para que el Instituto Butantan produjera otras 40 millones.
Esta vacuna ha sido objeto de disputa política entre el Ministerio de Salud, el presidente Jair Bolsonaro y Doria. El mandatario ha manifestado su escepticismo sobre su eficacia, por lo que el gobernador paulista ha pedido dejar de lado las "discusiones inútiles e ideológicas" y concentrarse en la "aprobación y distribución" de los medicamentos.