Las Fuerzas Armadas de Australia continuarán patrullando el mar de la China Meridional en medio de las crecientes tensiones en la región y después de la reciente declaración del Ministerio de Defensa chino advirtiendo de que la independencia de Taiwán (China) "significa una guerra".
"Los barcos y aviones australianos continuarán ejerciendo los derechos bajo la legislación internacional de libertad de navegación y de sobrevuelo, incluido en el mar de la China Meridional, y apoyamos a otros que hagan lo mismo", cita The Guardian a un portavoz el Departamento de Defensa de Australia.
El comentario el vocero se produjo en respuesta a una pregunta sobre la llegada de un grupo de buques de guerra estadounidenses a esas disputadas aguas y sobre si la nueva Administración Biden había solicitado a Australia que se uniera a ellos en el mar de la China Meridional o si Canberra pronto realizaría sus propios ejercicios.
El pasado sábado, el portaviones estadounidense USS Theodore Roosevelt, acompañado por tres navíos de guerra, entró en las aguas del mar de la China Meridional, que Pekín considera de su soberanía. Los militares estadounidenses declararon que pasaron por la zona promoviendo la libertad de navegación en los mares. En respuesta, el Ministerio de Asuntos Exteriores de China acusó a EE.UU. de provocar inestabilidad en Asia.
Ese mismo día, Pekín aprobó una ley que autoriza a sus guardacostas a disparar contra buques extranjeros que entren a sus aguas soberanas. Asimismo, Taiwán denunció la entrada de aviones militares chinos en el extremo suroeste de su zona de identificación de defensa. En respuesta, Washington reafirmó su compromiso con la defensa de la isla.
En este contexto, el representante del Departamento de Defensa de Australia afirmó que su país está "al tanto de la situación en Taiwán" y continúa "monitoreando su desarrollo".