Raúl Castro, el hombre que inició la era de transformaciones en Cuba "para asegurar la continuidad de la Revolución"
Raúl Castro anunció este viernes su retirada como primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
Se trata de un hecho histórico. Castro, actualmente de 89 años, estuvo en ese puesto durante una década, cuando lo asumió el 19 de abril de 2011. En ese período, el líder político impulsó una serie de cambios para "asegurar la continuidad de la Revolución".
Hoy, al hacer el histórico anuncio, expresó su satisfacción por entregar la dirección del partido a una nueva generación de dirigentes y recalcó que no aceptará propuestas para ejercer liderazgos dentro del buró político. En cambio, dijo que se mantendría "militando como un combatiente revolucionario más".
"Nada me obliga a esta decisión. Creo fervientemente en la fuerza y el valor del ejemplo y en la comprensión de mis compatriotas; y que nadie lo dude que mientras viva estaré listo con el pie en el estribo para defender a la patria, a la revolución y al socialismo, con más fuerza que nunca", enfatizó en su discurso, pronunciado ante el llamado Congreso de la Continuidad.
Joven combatiente
Raúl Modesto Castro Ruz nació el 3 de junio de 1931 en Birán, Holguín, entonces provincia de Oriente, siendo el menor de siete hijos. Entre sus hermanos mayores está Fidel, el líder de la Revolución Cubana.
En la universidad ya participaba en las luchas estudiantiles, principalmente contra el gobierno de Carlos Prío Socarrás (1948-1952) y la tiranía de Fulgencio Batista (1952-1959). En esa época formó parte del grupo de jóvenes que el 26 de julio de 1953 asaltaron el Cuartel Moncada, en la ciudad de Santiago de Cuba, cuyo mando estaba a cargo de Fidel; en esa ocasión, Raúl estuvo al frente del comando que tomó el Palacio de Justicia.
Por su participación en ese asalto, Raúl fue condenado a 13 años de cárcel y trasladado al Presidio de la Isla de Pinos, actualmente Isla de la Juventud. Sin embargo, el 15 de mayo de 1955 salió en libertad por una Amnistía y se exilió en México, desde donde ayudó a Fidel a organizar el movimiento revolucionario.
En 1956 regresó a Cuba y formó parte del Ejército Rebelde, creado para llevar a cabo la Guerra de Liberación Nacional contra la dictadura de Batista.
Actualizar el modelo
Luego de la huida de Batista y la entrada de los revolucionarios en La Habana, en 1959, el Ejército Rebelde se convirtió en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba. Entonces, Raúl fue designado Jefe Militar de la provincia de Oriente.
Después, cuando Fidel fue designado primer ministro del Gobierno provisional revolucionario el 16 de febrero, Raúl asumió la Jefatura de las Fuerzas de Tierra, Mar y Aire de la República y más tarde, el 16 de octubre, al crearse el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, asumió su titularidad hasta febrero de 2008.
También tuvo otros cargos, como segundo secretario del Partido Comunista de Cuba, entre 1965 y 2011, y primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba, entre 1976 y 2008.
El 24 de febrero de 2008 fue electo por la Asamblea Nacional como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, sucediendo así oficialmente Fidel, puesto que ya ejercía como su sucesor constitucional desde 2006. Fue reelecto para un segundo mandato en febrero de 2013, cargo que ocupó hasta el 19 de abril de 2018.
"El país tendrá como prioridad satisfacer las necesidades básicas de la población, tanto materiales como espirituales, partiendo del fortalecimiento sostenido de la economía nacional y de su base productiva, sin lo cual, repito una vez más, sería imposible el desarrollo", dijo en su discurso en 2008.
Durante su gestión, Raúl llevó a cabo una serie de cambios en el país, en su afán de "perfeccionar el modelo socialista" o hacer una "actualización del modelo", como lo aseguró en varias intervenciones.
Entre los cambios que se dieron se cuentan:
- La reestructuración del Gobierno con la fusión de varios ministerios y la sustitución de casi la mitad de los ministros.
- Mayores facilidades para los viajes al extranjero.
- Concesión en usufructo a los agricultores las tierras ociosas.
- Acceso a telefonía móvil e internet a los ciudadanos.
- Permiso para negocios privados, compra-venta de autos y casas.
- Los cubanos comenzaron a ser bienvenidos en hoteles e instalaciones turísticas de la Isla.
El deshielo con EE.UU.
En abril de 2015, Raúl se convirtió en el primer presidente cubano en intervenir en una Cumbre de las Américas, desde que se celebra este foro en 1994 y lo hizo, concretamente en la VII edición, efectuada en Panamá.
"Ya era hora de que yo hablara aquí a nombre de Cuba [...] Como me deben seis cumbres que nos excluyeron, 6x8, 48 minutos me tocaría hablar", dijo jocosamente al iniciar su discurso.
También hubo un refrescamiento en las relaciones con EE.UU. A finales del 2014, después de 54 años de hostilidad y tras 18 meses de conversaciones secretas, Raúl y su homólogo estadounidense Barack Obama anunciaron el inicio de un proceso de normalización de las relaciones.
Durante las negociaciones se logró:
- El restablecimiento de las relaciones diplomáticas.
- La eliminación de Cuba de la lista estadounidense de países terroristas.
- Restablecimiento de los vuelos comerciales entre ambos países.
- La reposición del servicio postal entre ambos países, por primera vez desde 1963.
- El retorno a Cuba de Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Gerardo Hernández, presos durante 15 años en EE.UU. y considerados "héroes" en territorio cubano.
En marzo de 2016, Obama se convirtió en el primer presidente de EE.UU. en visitar Cuba desde 1928.
El proceso de normalización de relaciones duró hasta 2017, cuando entró a la Casa Blanca Donald Trump, y terminó sin levantarse el bloqueo económico, financiero y comercial de Washington contra La Habana ni retirarse la base naval estadounidense en Guantánamo. De hecho, la llegada del republicano significó el recrudecimiento de las sanciones y la escalada de las agresiones por parte de Washington contra la Isla.
Sin improvisación
Otro hito importante en la administración de Raúl fueron las negociaciones entre el Gobierno de Colombia y las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo (FARC-EP), que se dieron en La Habana y que concluyeron en 2016, con la firma de un Acuerdo de Paz.
Sin embargo, en ese mismo año, Raúl tuvo el difícil momento de anunciar la muerte de su hermano y compañero de lucha Fidel.
"Con profundo dolor, comparezco para informar a nuestro pueblo, a los amigos de nuestra América y del mundo que hoy, 25 de noviembre del 2016, a las 10:29 horas de la noche falleció el comandante en jefe de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz", dijo en un mensaje televisado.
El 19 de abril de 2018, Raúl Castro entregó la Presidencia de los Consejos de Estado y de Ministros al actual mandatario cubano Miguel Díaz-Canel.
"El compañero Díaz-Canel no es un improvisado, a lo largo de los años ha demostrado madurez, capacidad de trabajo, solidez ideológica, sensibilidad política, compromiso y fidelidad hacia la Revolución. Su ascenso a la máxima responsabilidad estatal y gubernamental de la nación no ha sido fruto del azar ni de apresuramientos", dijo entonces.
En esa oportunidad también adelantó que el paso lógico sería que Díaz-Canel asumiera en 2021 el cargo de Primer Secretario del Comité Central del Partido, puesto que hoy Raúl deja vacante con su retiro.