El principal sospechoso del caso Madeleine McCann será acusado de violar a una irlandesa en Portugal en 2004
Christian Brueckner, el principal sospechoso del secuestro de Madeleine McCann, la niña británica que desapareció en 2007 en Portugal cuando tenía tres años, será acusado de violar a una representante turística irlandesa en 2004, informa The Times.
Se sospecha que el sujeto atacó a Hazel Behan, en ese entonces de 20 años, en su apartamento en Praia da Rocha, en la región portuguesa de Algarve, a 30 minutos en auto del lugar donde fue secuestrada Madeleine.
Brueckner es un ciudadano alemán que posee un extenso historial criminal que incluye robos en hoteles, condenas por abuso sexual de menores y posesión de pornografía infantil. Desde 2019, se encuentra cumpliendo una condena de siete años de cárcel por violar a una mujer estadounidense de 72 años en 2005.
El sujeto quedó vinculado al caso McCann tras ser señalado por un testigo. Según este último, Brueckner se habría jactado, mientras estaba embriagado en un bar, de que conocía lo que sucedió con Madeleine. En junio del 2020, las autoridades alemanas anunciaron que Brueckner es el sospechoso principal en el caso de la niña desparecida.
Grandes paralelismos
Behan, de 37 años, quien renunció su derecho al anonimato, se comunicó con la Policía británica en 2020 después de leer en las noticias sobre un ataque sexual similar de Brueckner. Demandó a los investigadores revisar su caso pues cree que su agresor pudo ser el sospechoso del caso Madeleine McCann.
Ahora la Policía federal alemana, que dirige la investigación sobre el sospechoso, espera presentar "en los próximos tres meses" cargos oficiales en su contra por violar a Behan.
El fiscal Hans Christian Wolters explicó que hay grandes paralelismos entre el ataque a Behan, la violación de la turista estadounidense, por la que Brueckner fue condenado, y el "secuestro y asesinato de Madeleine McCann".
"En todos los casos, la persona ha entrado en el apartamento o la propiedad de la persona por medio de allanamiento de morada, a menudo sin pasar por la puerta", detalló Wolters.