Aunque Estados Unidos no considera que el Gobierno ruso haya estado implicado en el 'hackeo' al suministrador de combustibles Colonial Pipeline, los piratas informáticos detrás del ataque podrían encontrarse en el territorio ruso, ha afirmado el presidente estadounidense Joe Biden.
Hablando en rueda de prensa desde la Casa Blanca, el mandatario norteamericano se refirió a un informe del FBI para afirmar: "No creemos que el Gobierno ruso haya estado involucrado en el ataque, pero hay firmes razones para creer que los delincuentes que lo realizaron viven en Rusia, es de dónde llegó".
"Estamos en contacto directo con Moscú sobre el imperativo para que los países responsables tomen medidas decisivas contra las redes detrás del 'ransomware'", dijo.
Washington, a su vez, también emprenderá medidas para socavar su habilidad de actuar, sostuvo el presidente, precisando que el Departamento de Justicia ha formado un nuevo grupo de trabajo encargado de "enjuiciar a 'hackers' extorsionistas con todo el peso de la ley".
Biden mencionó que había firmado un decreto ejecutivo la noche pasada destinado a mejorar la seguridad cibernética de objetos de infraestructura mediante mayor colaboración entre agencias federales y el sector privado en la integración de tecnologías en esta materia.
- Colonial Pipeline fue objeto de un ataque cibernético el pasado 7 de mayo, tras lo cual el operador se desconectó y no reinició sus operaciones hasta la noche del miércoles.
- La empresa privada suministra el 45 % de los combustibles, incluida gasolina y diésel, a la costa oriental de EE.UU., transportando 2,5 millones de barriles al día. La suspensión del suministro causó largas colas en gasolineras y compras de pánico, provocando un déficit y disparando el precio de la gasolina hasta los 2,99 dólares por galón, el máximo desde noviembre de 2014. Se reporta que más de 1.000 gasolineras en la región han agotado ya sus reservas.
- Georgia, Carolina del Norte y Florida declararon el estado de emergencia este martes y ajustaron regulaciones para acelerar los suministros de combustible.
- La agencia Bloomberg informó este jueves citando a dos fuentes que horas después del ataque, Colonial Pipeline pagó 5 millones dólares en una criptomoneda para desbloquear sus sistemas de transporte de combustibles paralizados por un virus maligno, atribuido al colectivo DarkSide.