La compañía estatal de defensa israelí Rafael Advanced Defense Systems presentó este martes 29 de junio su nuevo misil de quinta generación. Se trata del denominado Sea Breaker, un armamento autónomo y de alto alcance, que tiene una autonomía de hasta 300 kilómetros con un margen de error de pocos metros.
De acuerdo con el fabricante, el misil puede ser lanzado desde barcos de distintos tamaños y desde plataformas terrestres, incluso desde vehículos. Además, a través de su sistema de inteligencia artificial y gracias a sus sensores es capaz de identificar objetivos marítimos y terrestres de manera autónoma. También cuenta con una capacidad de aborto en pleno vuelo y evaluación de daños de batalla.
El Sea Breaker, de cuatro metros de largo y con un peso menor a los 400 kilos, vuela a alta velocidad subsónica y posee una ojiva de penetración, explosión y fragmentación de 250 libras, por lo que un impacto tiene la capacidad de neutralizar un barco del tamaño de una fragata.
Además, sus dispositivos infrarrojos y de capacidad de reconocimiento le permiten esquivar obstáculos durante el vuelo y viajar a baja altitud para no ser detectado por los radares enemigos. Esos equipamientos también permiten que sea lanzado de día y de noche y bajo cualquier condición meteorológica.
Ran Gozali, jefe de la División de Sistemas Terrestres y Navales de Rafael, afirmó que todos los dispositivos con los que cuentan los misiles les permiten "hacer frente a las amenazas y desafíos emergentes en el campo de batalla de próxima generación".
En tanto, un alto directivo de la compañía citado por medios locales aseguró que Sea Breaker puede atacar objetivos "cuando quieras, como quieras y desde donde quieras".