Actualidad
EE.UU. acusa a China de "actividades desestabilizadoras" y "esfuerzos por socavar el orden internacional"
El secretario de Estado de EE.UU. y el jefe del Pentágono han ofrecido más detalles relativas al nuevo pacto trilateral en una rueda de prensa conjunta con sus homólogos australianos.
La nueva alianza de seguridad para el Indo-Pacífico, formada por Estados Unidos, Australia y el Reino Unido, tiene en la mira a China y busca reforzar la "disuasión integrada en la región" ante las maniobras militares de Pekín, según se desprende de las últimas declaraciones de los representantes del Gobierno norteamericano.
"Hemos hablado en detalle sobre las actividades desestabilizadoras de China y de los esfuerzos de Pekín por coaccionar e intimidar a otros países, en contra de las reglas y normas establecidas", ha declarado este jueves el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, durante una rueda de prensa conjunta con el secretario de Estado, Antony Blinken, y sus homólogos australianos.
Si bien Austin ha afirmado que su país busca "resultados constructivos" en sus relaciones con China, mantiene los ojos abiertos respecto a "los esfuerzos de Pekín por socavar el orden internacional establecido".
Al pronunciarse sobre el compromiso de EE.UU. de facilitarle a Australia tecnologías para la construcción de submarinos de propulsión nuclear en el marco del nuevo pacto trilateral, el jefe del Pentágono ha sostenido que "esto mejorará significativamente el alcance y las capacidades defensivas de la Armada australiana" y también contribuirá a la "disuasión integrada en la región".
Por su parte, Blinken ha detallado que EE.UU. no exigió concesiones a Australia a cambio de su ayuda con la construcción de los submarinos nucleares. "Desde mi punto de vista, no hay requisitos recíprocos de ningún tipo", ha señalado el secretario de Estado norteamericano.
"Esto es una colaboración, es un acuerdo de cooperación con nosotros, con Australia, con el Reino Unido", ha agregado Blinken.
La discordia con Francia por los submarinos nucleares
La decisión de Australia de adquirir los submarinos de propulsión nuclear conllevó la rescisión del programa de submarinos convencionales que tenía con Francia, en el marco del cual se preveía la construcción de una flota de 12 sumergibles bajo un contrato multimillonario con Naval Group.
El Gobierno francés tachó la decisión de "lamentable" y "contraria a la letra y al espíritu de la cooperación que prevalecía" entre ambos países, y declaró que la "elección estadounidense de excluir a un aliado y socio europeo como Francia" de una alianza estratégica con Australia, cuando se afrontan "desafíos sin precedentes" en el Indo-Pacífico, "muestra una falta de coherencia que Francia no puede sino constatar y lamentar".
El ministro de Exteriores francés Jean-Yves Le Drian incluso tildó el paso de "una puñalada por la espalda" y declaró que Australia traicionó su "relación de confianza" al tomar "esta decisión unilateral, brutal e imprevisible", "muy parecida a lo que hacía el señor Trump".
Durante la rueda de prensa, Blinken ha hecho referencia al descontento de París y ha asegurado que cooperan "de forma increíblemente estrecha con Francia en muchas prioridades compartidas en el Indo-Pacífico, pero también en todo el mundo", agregando que le atribuyen "un valor fundamental a esa relación y cooperación".
"Anticuado pensamiento de la Guerra Fría"
En China tampoco se han quedado de brazos cruzados tras el anuncio del nuevo acuerdo que, se cree, pretende desafiar sus propios intereses nacionales. El portavoz del Ministerio de Exteriores del gigante asiático, Zhao Lijian, declaró que "los países pertinentes deben abandonar su anticuado pensamiento de la Guerra Fría de 'suma cero' y otros conceptos geopolíticos obtusos, respetar los deseos de los pueblos de la región y hacer más cosas que conduzcan a la paz, la estabilidad y el desarrollo regionales".
"De lo contrario, solo se dispararán a sí mismos en el pie", añadió.
Por su parte, el portavoz de la Embajada de China en EE.UU., Liu Pengyu, manifestó que los integrantes de la nueva alianza estratégica "no deberían construir bloques excluyentes que apunten o perjudiquen los intereses de terceros" y en lugar de ello deberían desprenderse "de sus prejuicios ideológicos".
comentarios