Actualidad
Alcalde de una ciudad ucraniana se niega a transferir los restos de un héroe de la URSS a sus familiares rusos, pese a una decisión judicial
En las últimas décadas la tumba de Nikolái Kuznetsov ha sido vandalizada varias veces por nacionalistas ucranianos.
Andréi Sadovi, alcalde de la ciudad de Leópolis, en el oeste de Ucrania, rechazó este viernes cumplir con la decisión de la Corte Administrativa de Casación del país, que obliga a transferir los restos del agente soviético Nikolái Kuznetsov a sus familiares residentes en Rusia.
Afirmando que la solicitante del caso, iniciado en 2008, es una ciudadana rusa, el político indicó en su página de Facebook que "no colaborará con los ocupantes" y preguntó retóricamente a "las personas que toman tales decisiones [judiciales]" si Rusia estaría dispuesta a devolver "a 121 ciudadanos de Ucrania que actualmente están reclusos por motivos religiosos y políticos, así como 296 personas que están en condiciones inhumanas en territorios ocupados".
Esta no es la primera vez que las autoridades ucranianas se niegan a transferir los restos del agente soviético para que sus parientes puedan enterrarlo en Rusia.
Kuznetsov fue agente del NKVD, el departamento gubernamental soviético precursor de la KGB. Durante la Gran Guerra Patria actuó en el frente alemán, donde se dedicó a tareas de inteligencia y sabotaje infiltrado haciéndose pasar por un oficial de las Fuerzas Armadas del Tercer Reich.
En particular, el agente soviético acabó con la vida de 11 generales nazis y obtuvo información crucial sobre los planes de los alemanes que dieron lugar a la batalla de Kursk, así como de las intenciones de perpetrar un atentado para asesinar a los líderes aliados durante la conferencia de Teherán de 1943.
Murió en la primavera de 1944 cerca de Leópolis a manos del Ejército Insurgente Ucraniano, la organización militar clandestina que colaboró con los alemanes y que actualmente es glorificada por ciertas autoridades ucranianas, grupos nacionalistas y movimientos de extrema derecha del país.
En diciembre del mismo año, Kuznetsov fue galardonado con la estrella del Héroe de la Unión Soviética, el más alto reconocimiento que se concedía en el país.
Después de la guerra, los restos de Kuznetsov fueron enterrados en un memorial de Leópolis. Sin embargo, en las últimas décadas la tumba ha sido vandalizada varias veces por los nacionalistas ucranianos.
comentarios