Colombia considera una "equivocación descomunal" la idea de fortalecer la Celac para "enterrar a la OEA" y rechaza que se dé la espalda a EE.UU.

"Jamás acompañaremos esa posibilidad", dijo la viceministra de Asuntos Multilaterales, María Carmelina Londoño, en la XXII Reunión de Cancilleres de la Celac.

El Gobierno colombiano rechazó este viernes las afirmaciones que han hecho algunos políticos de la región en torno a que el fortalecimiento de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) puede ser una alternativa para sustituir a la Organización de Estados Americanos (OEA).

"Colombia rechaza afirmaciones como la que se han hecho repetidamente en los últimos meses de que fortalecer a la Celac va en la línea de enterrar a la OEA, pues jamás acompañaremos esa posibilidad, que nos parecería una equivocación descomunal", dijo la viceministra de Asuntos Multilaterales, María Carmelina Londoño, en la XXII Reunión de Ministros y Ministras de Relaciones Exteriores de la Celac, celebrada en Buenos Aires y donde Argentina asumió la presidencia temporal del organismo.

Londoño, quien acudió en representación de la vicepresidenta y canciller colombiana, Marta Lucía Ramírez, afirmó que la idea de sustituir la organización que actualmente dirige el uruguayo Luis Almagro sería "una gran irresponsabilidad con las necesidades de las generaciones actuales y futuras" de la región, que, a su juicio, "requerirán del acervo doctrinal y la defensa de los derechos humanos y la democracia con la que cuenta la OEA".

Asimismo, consideró que con esa idea parecería que "afanosamente" y "sin claridad en las intenciones" se quiere "dar la espalda" a EE.UU. y Canadá, países miembros de la OEA, pero no de la Celac.

"El potencial de todas nuestras naciones será mayor si visualizamos que la integridad de nuestro hemisferio también nos brinda grandes oportunidades en la cercanía y en la integración con Canadá y EE.UU., dos socios estratégicos", enfatizó en su discurso la funcionaria colombiana.

Añadió que con estos dos países, considerados hegemónicos por parte de la Celac, "es posible desarrollar una relación más constructiva y fructífera, incluso privilegiada".

¿Reemplazar o mejorar?

A mediados del año pasado, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, propuso construir un organismo que pudiese sustituir a la OEA, que sea "verdaderamente autónomo" y "no lacayo de nadie".

Más adelante, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, durante una comparecencia en el Senado dijo que su país no había propuesto la eliminación de la OEA, sino que planteaba que el ente hemisférico evolucionara.

"México no ha propuesto que sea eliminada la OEA, lo que hemos dicho es que debe sustituirse la OEA por un instrumento superior", comentó, y dijo que para ello el organismo "debería evolucionar hacia otro tipo de organización".

En septiembre del año pasado, durante una entrevista con RT, el presidente de Bolivia, Luis Arce, sí fue tajante al respecto y manifestó que "el potenciamiento de la Celac es una alternativa" que conduciría a "enterrar la OEA".