Moscú ha denunciado que EE.UU. busca desviar la atención del "escándalo" de sus laboratorios biológicos hablando de un hipotético uso de armas químicas en Ucrania por parte de Rusia, y asegura que no es la primera vez que Occidente utiliza esta táctica de acusaciones infundadas para justificar sus acciones.
"Está claro que los estadounidenses están tratando de desviar la atención. Hablan de una amenaza efímera del uso de armas químicas por parte de Rusia. Esto no es más que un intento de desviar la atención del escándalo que estalló, pero es poco probable que tengan éxito, resaltó el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov.
Al mismo tiempo que se lanzan las acusaciones de la OTAN contra Moscú, los diplomáticos rusos advierten de ataques químicos de falsa bandera, cuyo montaje estaría siendo preparado por radicales ucranianos con la asistencia precisamente de la inteligencia occidental.
El representante permanente adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitri Polianski, advirtió ante el Consejo de Seguridad sobre este aspecto. "Los radicales ucranianos ya se están preparando para ponerlos en marcha con ayuda de la inteligencia occidental y empresas militares privadas y acusar a Rusia del supuesto uso de armas químicas" indicó el alto funcionario.
Historial de acusaciones infundadas
Según el Kremlin, no es la primera vez que Occidente utiliza esta táctica de acusaciones infundadas. En este sentido, cabe recordar los ataques químicos en Siria que al final no fueron verificados, pero Washington y sus aliados no tardaron en culpar a Damasco y Moscú, y usar estas acusaciones para justificar el ataque de Occidente contra Siria.
Por otro lado, Moscú recordó que EE.UU. ya tiene un historial de uso de armas químicas y biológicas como pretexto para sus acciones. En Irak, se demostró que los informes de inteligencia estadounidenses no correspondían con la realidad sobre el terreno y muchos temen que la situación pueda repetirse.
Los miembros de la OTAN se reunieron este jueves en Bruselas para abordar la situación en Ucrania y la respuesta militar del bloque ante el aumento de la tensión en la región. Sobre la mesa estuvo la cuestión de un hipotético uso de armas químicas por parte de Rusia. En este sentido el presidente estadounidense, Joe Biden, aseguró que la respuesta de la Alianza no se hará esperar. "Responderemos si las usan. La naturaleza de la respuesta dependerá de la naturaleza de la acción", indicó Biden.