Ministerio de Defensa ruso: Kiev obliga a los batallones nacionalistas a grabar videos escenificados para incriminar a las fuerzas rusas
Las autoridades ucranianas "sistemáticamente" obligan a los batallones nacionalistas a hacer grabaciones escenificadas que muestran asesinatos masivos de civiles, saqueos y destrucciones de la infraestructura social supuestamente perpetrados por las tropas rusas, afirmó este martes el jefe del Centro Nacional de Gestión de la Defensa Nacional de Rusia, Mijaíl Mizíntsev.
"El cinismo especial de los nacionalistas se radica en el hecho de que, para realizar tales tareas, hacen cualquier cosa y no les dan pena ni las mujeres, ni los ancianos, ni los niños", dijo el representante del Ministerio de Defensa ruso. De acuerdo con Mizíntsev, tales materiales están destinados a "crear un trasfondo negativo" acerca de la operación especial militar rusa en el país vecino.
"A pesar de esto, la mayor parte de la población de Ucrania, que sabe la situación real, busca cualquier oportunidad para evacuar hacia la Federación de Rusia", agregó. Al respecto, el funcionario detalló que 488.930 personas, entre ellos 101.423 niños, ya han sido evacuadas a Rusia desde el inicio del operativo militar.
El Ministerio de Defensa de Rusia anunció la apertura de corredores humanitarios desde Kiev, Járkov, Mariúpol, Sumy y Chernígov, con salidas tanto a Rusia, como hacia las fronteras occidentales de Ucrania, si bien la parte ucraniana aprobó solo dos de los corredores propuestos por Moscú y ninguno con salida al territorio del país vecino. Según Mizíntsev, se determinó también que las administraciones locales no informaron a la población sobre la apertura de los corredores.
Mientras, este 29 de marzo, las fuerzas rusas han suministrado más de 405 toneladas de productos esenciales y alimentos a los civiles en el marco de 25 operaciones humanitarias llevadas a cabo en las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, así como en distintas localidades de Ucrania.
Desde el Ministerio ruso también denunciaron que las unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania y los batallones de neonazis utilizan el alto al fuego para recuperar sus capacidades operativas y organizar posiciones de tiro en barrios residenciales, hospitales, escuelas y guarderías, donde continúan reteniendo por fuerza a la población civil en calidad de "escudo humano".
Se detalla que los nacionalistas ucranianos retienen como rehenes a más de 4,5 millones de civiles ucranianos y 6.515 ciudadanos extranjeros en Kiev, Járkov, Chernígov, Sumy y Mariúpol, así como en más de veinte localidades.