Alberto Fernández y Luis Arce firman un acuerdo para que Argentina adquiera gas boliviano

El presidente de Argentina, Alberto Fernández, y su par de Bolivia, Luis Arce, firmaron este jueves en Buenos Aires un nuevo acuerdo para la comercialización de gas natural, mientras el Gobierno peronista busca evitar el desabastecimiento energético de cara al próximo invierno, que comenzará a mediados de junio.

"Con esto Argentina tiene garantizado el suministro", aseguró Arce desde la Casa Rosada, durante una conferencia de prensa conjunta. "Seguimos en nuestro sueño de avanzar en la Patria Grande. Cuando hay necesidades, tenemos que ayudarnos, como hermanos", agregó.

En el encuentro se determinó el volumen y precio del gas licuado boliviano que será vendido al país vecino. Sin embargo, durante la rueda de prensa no trascendieron las cifras exactas: "El contrato que teníamos vigente, se mantiene en las mismas condiciones", expresó Fernández. "Bolivia asume un compromiso adicional, de que si hay un incremento en la producción de gas, Argentina va a tener prioridad para acceder a ese incremental", agregó.

Este anuncio cobra relevancia porque Brasil, la principal economía de Sudamérica, también importa gas boliviano. Sobre ello, Arce expresó: "Con Brasil estamos con negociaciones. Hubo un contrato que lamentamos se haya firmado en el Gobierno de facto, muy contrario a los intereses de los bolivianos".

Así, esta operación se realizará para poder afrontar la creciente demanda energética de los argentinos, que aumentará a medida que bajen las temperaturas. Los diálogos presenciales entre ambos mandatarios ya habían comenzado hace un mes en Chile, cuando Gabriel Boric asumió la Presidencia de aquella nación.

"Los presidentes de Argentina y Bolivia decidieron encabezar ellos mismos la negociación por la provisión de gas para el invierno porque lleva meses trabada y representa un recurso estratégico y esencial para nuestro país", le dijo el canciller argentino, Santiago Cafiero, a Télam. 

Modificaciones al acuerdo firmado entre Evo Morales y Néstor Kirchner

Las negociaciones se enmarcan en un contexto internacional complejo, caracterizado por el conflicto entre Rusia y Ucrania, que ocasiona cambios de precios y la dificultad de transportar gas natural licuado por la vía marítima. A nivel interno, las sequías que afronta Argentina ponen un nuevo obstáculo para la generación de energía hidroeléctrica, sumado a que la producción local de gas no logra satisfacer toda la demanda. 

Antes de que los presidentes participaran de modo personal en las negociaciones, los diálogos eran encabezados por los equipos técnicos de las empresas estatales Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) e Integración Energética Argentina (IEASA). Ambas firmas discuten desde fines de 2021 la sexta modificación al pacto que firmaron Néstor Kirchner y Evo Morales en 2006, por 20 años.

La Casa Blanca busca "privar a Rusia de cualquier ingreso que reciba de los suministros de petróleo y gas"

Los cambios se producen porque "Bolivia ha mostrado un declive en la producción de gas, básicamente por una falta de inversión en el Gobierno de Áñez", indicó el mandatario argentino. 

Además, el Gobierno de Arce planteó revisiones en los valores, por la reciente escalada de precios en el mercado internacional. Según la Secretaría de Energía argentina, entre mayo y septiembre la demanda será cubierta con un 73 % del gas nacional, mientras que un 9 % provendría de Bolivia.

Mejoran las relaciones bilaterales 

"Cuando estuvo la autodenominada presidenta Añez, no tuvimos relaciones con Bolivia", subrayó Fernández. Ahora, con la llegada de Arce al poder, los vínculos entre Buenos Aires y La Paz mejoran. "Alberto es un gran amigo de nuestro Gobierno y del pueblo boliviano", contestó el jefe de Estado plurinacional. 

Con ese tono, Arce se refirió al papel que tuvo la administración peronista con los dirigentes del MAS perseguidos durante el golpe de Estado en Bolivia, incluyendo el asilo político de Evo Morales: "Nos sentimos agradecidos". Al respecto, un periodista le consultó cómo está la investigación sobre la colaboración de funcionarios de la administración de Mauricio Macri con el Gobierno de facto: "Lo está manejando la Justicia boliviana, hay paulatinos avances", respondió. 

Por último, el mandatario boliviano enfatizó que busca nuevos convenios en materia energética: "Queremos hacer acuerdos con el tema del litio, también con otros países", sostuvo. 

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