"Durante décadas, la línea de no alineación militar en la política exterior ha brindado un nivel confiable de seguridad para Suecia y Finlandia", reconoció la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, en un comentario publicado este viernes. A su juicio, "la pertenencia a la OTAN no es capaz de fortalecer su seguridad nacional".
Las recientes declaraciones sobre la posible adhesión de estos dos países del norte de Europa al bloque fueron anticipadas en los últimos años por una "campaña deliberada de las fuerzas externas para involucrarlos".
Según la Cancillería, las autoridades suecas y finlandesas deben asumir las consecuencias que el posible ingreso de estos países en la Alianza Atlántica implicaría en sus relaciones con Rusia y en la "arquitectura europea de seguridad en general, la cual se encuentra ahora en una condición crítica", recoge la Cancillería.