La historia de Geraldo Alckmin, de 69 años y casi con toda seguridad el compañero de fórmula de Luiz Inácio Lula da Silva para disputar las elecciones presidenciales en octubre en Brasil, comienza con un médico de un pequeño municipio que se convierte en alcalde.
Pausado, discreto, moderado y alejado, según sus propias palabras, de los espectáculos de la política –"no soy un showman", comentó–, este histórico político también es considerado aburrido y sin carisma.
Nació en 1952 en Pindamonhangaba, en el norte de Sao Paulo, y la pérdida de su madre por una bronquitis cuando tenía 10 años le empujó a estudiar medicina.
Desde muy joven mostró un gran interés por la política y pronto se afilió al Movimiento Democrático Brasileiro (MDB), opuesto a la dictadura militar (1964-1985).
Un ascenso trepidante
El ascenso de Alckmin, ferviente católico conservador, fue trepidante. En 1977, con solo 24 años, se convirtió en el alcalde más joven del país. "No soy hijo de herencia política, ni de una fortuna personal. Vengo de una familia modesta y aprendí mucho del pueblo", explicó en una entrevista.
Durante años ejerció como alcalde mientras trabajaba como médico anestesista. "Me llamaron un sábado por la noche para hacer la anestesia de una cesárea (...) la paciente estaba despierta durante la cirugía. Yo iba con máscara, gorro. Estaba allí, a la dos de la madrugada, controlando el pulso, la presión, cuando la paciente se gira y me pregunta: 'Doctor, ¿cuándo van a colocar la red de alcantarillado?", contó a modo de anécdota.
Su idea era volver a ejercer exclusivamente como médico tras su paso por la alcaldía, pero no fue así. En 1982, fue elegido diputado estatal y se desempeñó después durante dos legislaturas como parlamentario federal.
Alckmin es conocido por ser uno de los fundadores, en 1988, del Partido Social Democracia Brasileira (PSDB), una de las principales formaciones políticas de las últimas décadas en Brasil, y que presidió desde 1991 hasta 1994. El PSDB llegaría al poder de la mano de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002).
En 1994, el político Mario Covas ofreció a Alckmin presentarse junto a él como vicegobernador de Sao Paulo, el estado más rico y poblado del país. Vencieron y cuatro años después fueron reelegidos. Covas falleció en 2001 por un cáncer de vejiga y Alckmin asumió el cargo.
En 2006, renunció para postularse a la presidencia de Brasil y perdió por un amplio margen en segunda vuelta frente a Lula, quien se convirtió en su principal rival político.
Alckim volvió a gobernar Sao Paulo de 2011 a 2018. Casado desde hace más de 40 años con Maria Lúcia Ribeiro, conocida como 'Lu', la pareja sufrió en 2015 una fatídica tragedia. Thomaz, el menor de sus tres hijos, falleció con 31 años en un accidente de helicóptero junto a otras cuatro personas.
"Perder un hijo es como algo de nosotros mismos que se va por delante. Invierte el orden natural de las cosas, que es que los hijos entierren a sus padres. No pasa. Uno se levanta por la mañana y se acuesta por la noche pensando. No desaparece. Lo carga el día entero en su corazón", dijo al recordar el suceso.
En 2018, volvió a presentarse a las elecciones presidenciales y quedó en cuarto lugar. Con Lula en la cárcel condenado por corrupción –sentencias que después serían anuladas y quedaría en libertad–, Jair Bolsonaro se alzó como ganador.
Una sorpresiva alianza
Alckmin abandonó este año su bastión político, el PSDB, tras más de tres décadas de trayectoria, al ser marginado en el partido por el actual gobernador de Sao Paulo, Joao Doria.
En marzo, se afilió en marzo al Partido Socialista Brasileño (PSB). Un movimiento destinado a caminar de la mano junto al petista hacia la Presidencia, y que para muchos fue visto como una "traición" a su partido de toda la vida.
Pero tanto Lula como Alckmin, que presentaron su alianza a principios de este mes, minimizan sus diferencias y anteponen –dicen– la defensa de la democracia frente al autoritarismo de Bolsonaro.
"Los tiempos cambian, las personas cambian y la historia cambió. Hoy tenemos un gobierno cruel con el pueblo, que no puede continuar", comentó recientemente.
El próximo sábado está previsto que el petista presente de manera oficial su precandidatura y designe a Alckmin como aspirante a la vicepresidencia. Un "matrimonio político" con el que líder del PT espera llegar a los electores de centro y más conservadores decepcionados con Bolsonaro en su intento de derrotar al ultraderechista en unas elecciones que se auguran como las más polarizadas de la historia de Brasil.