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Reino Unido retrasa los cierres de sus centrales eléctricas de carbón y podría imponer límites al uso industrial del gas
6 millones de hogares podrían enfrentar cortes de energía a lo largo de más de un mes, principalmente en los picos de la mañana y la tarde, informa The Times.
El Gobierno de Reino Unido estaría trabajando en elaborar diferentes planes para racionar la electricidad durante el próximo invierno, así como habría modelado un "razonable" peor escenario posible que predice una gran escasez de gas en caso de que Rusia deje de suministrar su energía a la Unión Europea, según reporta The Times.
De acuerdo al medio, las autoridades británicas podrían imponer límites al uso industrial del gas, incluidas las centrales eléctricas alimentadas con este hidocarburo, un hecho que provocaría cortes de electricidad. Como resultado, 6 millones de hogares podrían enfrentar cortes de energía a lo largo de más de un mes, principalmente en los picos de la mañana y la tarde.
Por otra parte, el secretario de Estado para Negocios, Energía y Estrategia Industrial británico, Kwasi Kwarteng, habría solicitado retrasar los cierres previstos de las centrales eléctricas de carbón del país, incluidas las de Drax, Ratcliffe y West Burton, cuyo funcionamiento debía cesar en septiembre, además de prolongar la vida útil de Hinkley Point B, una central nuclear ubicada en el condado Somerset, cuyo fin de actividad estaba previsto para verano.
Estos planes fueron confirmados por el ministro de Tecnología, Chris Philp, quien señaló que el Gobierno estaba buscando "medidas de precaución sensatas para protegerse contra el peor de los casos".
"[El Sr. Kwarteng] pidió, creo, a los tres operadores restantes de centrales eléctricas de carbón que mantuvieran sus centrales eléctricas disponibles, y creo que está considerando si Hinkley B, la gran central nuclear, podría continuar más allá de su fin de vida planificado", declaró.
Por otro lado, un portavoz gubernamental, cuyo nombre no trascendió, también se pronunció sobre la necesidad de mantener en funcionamiento las centrales de carbón. "Si bien no hay escasez de suministro, es posible que debamos hacer que nuestras centrales eléctricas de carbón restantes estén disponibles para proporcionar electricidad de respaldo adicional el próximo invierno si es necesario", afirmó.
En paralelo, Philp indicó que "el suministro de gas que sale de Rusia y Ucrania está, por razones obvias, muy interrumpido", mientras Reino Unido utiliza "una gran cantidad de gas para generar electricidad". Según sus palabras, el país usa una "proporción muy pequeña" de gas ruso, mientras que "gran parte" proviene de Noruega, en forma de gas natural licuado.
"Pero, por supuesto, la interrupción del mercado global de gas tendrá un efecto en cadena que puede afectar al gas que consumimos a nivel nacional en Reino Unido", dijo el ministro. "Así que creo que estas son solo medidas de precaución sensatas, solo para protegerse contra el peor de los casos", concluyó.
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