El portaaviones estadounidense USS Ronald Reagan y su grupo de ataque, que incluye un destructor y un crucero de misiles guiados, zarparon de Singapur este lunes en dirección noreste hacia el mar de la China Meridional, según la información proporcionada por el 'think tank' South China Sea Strategic Probing Initiative.
Se produce en medio del aumento de tensiones entre EE.UU. y China en torno a la posible visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, a Taiwán.
El Ejército estadounidense de momento no ha revelado el destino final de la flota, pero la ruta llevaría al grupo de portaaviones al estrecho de Taiwán si continúa en la misma dirección.
Previamente, funcionarios del Ejército del país norteamericano citados por AP informaron que, de concretarse el viaje de la legisladora, podrían aumentar su presencia militar en la región del Indo-Pacífico.
Según las fuentes consultadas por la agencia, probablemente sea necesario utilizar aviones de combate, barcos y otros sistemas militares para brindar anillos de protección a la comitiva durante su vuelo y su estadía en la isla.
Por su parte, Joe Biden comentó la semana pasada que considera que los militares del país se oponen a la idea de que Pelosi visite la isla. "Yo creo que los militares piensan que no es una buena idea ahora mismo, pero no sé cuál es el estado de la cuestión", expresó.
Postura de China
El Ministerio de Defensa de China advirtió este martes que los militares del país "no se quedarán de brazos cruzados" si se realiza la mencionada visita. Pekín "ha manifestado repetidamente su firme oposición" al viaje a la isla de la "'número tres' del Gobierno estadounidense", afirmó durante una conferencia de prensa el portavoz ministerial, Tan Kefei.
En esa misma línea, Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, subrayó que el gigante asiático ha dejado claro reiteradamente su firme oposición a ese viaje. "Estamos totalmente preparados para cualquier eventualidad", declaró el vocero, e insistió en que, si se mantienen los planes de la visita, "la parte china tomará medidas firmes y enérgicas" para defender su soberanía y la integridad territorial del país.
- El pasado sábado, The Financial Times reportó que la hipotética visita de la legisladora a Taiwán podría tener lugar en agosto, tras haber cancelado en abril una primera fecha de viaje por haberse contagiado de coronavirus
- En caso de concretarse el viaje de Pelosi, que ocupa el tercer cargo más importante en la jerarquía del poder político de EE.UU. –después del presidente y el vicepresidente–, sería la represente política estadounidense de más alto rango en visitar Taiwán desde 1997