El presidente ruso, Vladímir Putin, firmó este domingo los decretos que aprueban la nueva doctrina naval y el estatuto de buques de la Marina rusa. La ceremonia se celebró en el Museo Estatal de Historia de San Petersburgo, en la fortaleza de San Pedro y San Pablo, justo antes del inicio del desfile del Día de la Marina.
La nueva doctrina marítima identifica como las principales amenazas para la seguridad de Rusia el rumbo de EE.UU. hacia el dominio de los océanos del mundo y el crecimiento de la actividad de la OTAN. Entre los puntos principales del documento también se encuentran:
- El aumento de actividad de la Marina rusa en las islas Spitsbergen y Wrangel, la Tierra de Francisco José y el archipiélago de Nueva Zembla
- La falta del número adecuado de bases para buques de guerra fuera de Rusia es uno de los riesgos para sus actividades marítimas
- Se prevé la formación de puntos de apoyo logístico naval en los Estados de Asia-Pacífico
- Los nuevos riesgos para las actividades marítimas de Rusia son las pandemias de enfermedades peligrosas, que son difíciles de predecir
"Medidas adecuadas, rápidas y decisivas"
Durante su discurso en la inauguración del desfile naval, el mandatario ruso detalló que la nueva doctrina marítima define los límites y las zonas de los intereses nacionales del país euroasiático. "Hemos trazado abiertamente los límites y las zonas de los intereses nacionales de Rusia, tanto económicos como vitales y estratégicos. En primer lugar, se trata de nuestras aguas árticas, las aguas de los mares Negro, de Ojotsk y de Bering, el Báltico y los estrechos de las Kuriles. Los protegeremos con firmeza y por todos los medios", detalló.
En ese contexto, Putin subrayó que Rusia garantizará firmemente la defensa de sus fronteras marítimas por todos los medios y agregó que la Marina rusa está preparada para responder con la velocidad del rayo a cualquiera que atente contra la soberanía y la libertad rusas."[La flota] es capaz de responder con la velocidad del rayo a cualquiera que decida invadir nuestra soberanía y libertad", apuntó, añadiendo que la flota cumple con honor las tareas estratégicas en las fronteras del país y en cualquier parte de los océanos del mundo, tiene un alto grado de preparación para las operaciones activas y se mejora constantemente.
"La situación actual requiere que tomemos medidas adecuadas, rápidas y decisivas. Estoy convencido de que la actual generación de marineros y oficiales es un pilar fiable e indestructible de la Patria. Para todos nosotros la Patria es una noción sagrada, y su defensa es el alto deber y el sentido de la vida de cada uno de nosotros", manifestó. Asimismo, el jefe de Estado indicó que el bienestar de las familias de los marinos sigue siendo una prioridad absoluta.
La necesidad de modificar la doctrina naval
La necesidad de modificar la doctrina naval fue manifestada el pasado mes de mayo por el entonces viceprimer ministro Yuri Borísov, quien indicó que ese documento debe tener en cuenta la cambiante situación geopolítica y militar-estratégica del mundo.
El alto cargo señaló que es vital para Rusia reforzar sus capacidades para asegurar y proteger los intereses nacionales en los océanos del mundo y explicó que las nuevas disposiciones de la doctrina se refieren a la formación y preparación de la movilización en el ámbito de las actividades marítimas. Estas medidas garantizarán la introducción de buques y tripulaciones civiles en la Marina y el funcionamiento de la infraestructura marítima en tiempo de guerra, agregó.
Al mismo tiempo, Borísov subrayó que la nueva versión de la doctrina no tiene como objetivo la confrontación, sino la mejora de la seguridad nacional en el ámbito de las actividades marítimas y la reducción significativa de la dependencia de todos los ámbitos de las actividades marítimas de la influencia y la coyuntura externas.