Kissinger: "Estamos al borde de una guerra con Rusia y China por cuestiones que en parte creamos nosotros"
El exsecretario de Estado de EE.UU. Henry Kissinger considera que su país se encuentra al borde de una guerra con Moscú y Pekín por razones de las que Washington es coautor.
"Estamos al borde de una guerra con Rusia y China por cuestiones que en parte creamos, sin ninguna idea de cómo va a terminar esto o a qué se supone que conducirá", afirmó Kissinger en una entrevista con el diario The Wall Street Journal publicada este viernes.
"Ahora no se puede decir que vamos a separar y enfrentar [a Rusia y China]. Lo único que se puede hacer es no acelerar las tensiones y crear opciones, y para eso hay que tener algún propósito", agregó el ex alto funcionario, argumentando que Estados Unidos debería buscar un "equilibrio" con los dos países.
En cuanto al conflicto entre Moscú y Kiev, Kissinger, de 99 años, expresó que Occidente debería haberse tomado en serio las preocupaciones de seguridad del Kremlin, y tachó de "error" que "la OTAN le indicara a Ucrania que eventualmente podría unirse a la alianza".
En mayo, durante su discurso en el marco del Foro Económico Mundial en Davos (Suiza), Kissinger destacó la importancia de que Moscú y Kiev volvieran a la mesa de negociaciones en los siguientes dos meses para evitar que la crisis se agravara aún más. Para conseguirlo, el político admitió que Ucrania tendrá que ceder parte de sus territorios a Rusia.
Por estas declaraciones, Kissinger fue incluido en la lista negra del portal Mirotvórets, un sitio web radical ucraniano que tildó al político de "cómplice de crímenes de las autoridades rusas contra Ucrania y sus ciudadanos", ya que desde el web consideran que participó en "la operación especial de información de Rusia contra Ucrania".
Por su parte, el presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, arremetió contra el político estadounidense, afirmando que "parece como si el señor Kissinger no estuviera en 2022 sino en 1938 en su calendario", haciendo referencia al año en que se firmaron los acuerdos de Múnich, que aprobaron la incorporación a Alemania de la región de los Sudetes, que entonces pertenecía a Checoslovaquia.