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Francia invita a las empresas del país a ahorrar energía para no tener que enfrentarse a "apagones bruscos"
"En caso de racionamiento, las compañías serán las primeras en verse afectadas y todos debemos prepararnos para ello", declaró la primera ministra francesa.
Francia se verá obligada a racionalizar el gas y la electricidad durante el próximo invierno en caso de que Rusia corte totalmente el suministro de gas a la Unión Europea y las empresas no contribuyan a reducir el consumo, advirtió este lunes la primera ministra francesa, Élisabeth Borne.
Durante su intervención en una conferencia en París, organizada por el Movimiento de Empresas de Francia (Medef), la asociación de empleadores más grande del país, Borne destacó las sanciones impuestas contra Moscú en represalia por su operación militar especial en Ucrania, y agradeció a las compañías francesas que se retiraron del mercado ruso.
Sin embargo, la primera ministra reconoció que las medidas restrictivas de Occidente resultaron contraproducentes para París, puesto que provocó un incremento de la inflación. "Si Rusia cortara por completo sus exportaciones de gas a Europa, las consecuencias serían masivas" debido a que no hay "alternativas disponibles de inmediato", manifestó.
"Responsabilidad colectiva"
Borne hizo un llamado a la "responsabilidad colectiva" en materia de ahorro energético, invitando al sector público y privado, así como a particulares, a "preferir el ahorro" en lugar de enfrentarse a "apagones bruscos".
"En caso de racionamiento, las empresas serán las primeras en verse afectadas y todos debemos prepararnos para ello", agregó la primera ministra. En ese sentido, exhortó a las empresas a establecer en septiembre un "plan de sobriedad" energética, consistente en reducir el consumo en un 10 %.
"Fin de la abundancia"
Según Reuters, Francia depende menos, que algunos de sus vecinos, de las importaciones de gas ruso, que representan alrededor del 17 % de su consumo. Pero, los precios de la electricidad al por mayor en el país han alcanzado máximos históricos, y este lunes el valor de la energía de carga base para el próximo año llegó a los 1.200 euros por megavatio hora.
La semana pasada, el presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió que su país se encuentra ante el "fin de la abundancia". El mandatario explicó a los franceses que por la "defensa de la libertad" se requiere "hacer sacrificios" y sufrir privaciones, refiriéndose a la operación especial militar de Rusia en Ucrania a la que París tiene que oponerse.
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