Se suspende la ejecución por inyección letal de un hombre debido a problemas para acceder a sus venas
Un centro penitenciario en Alabama suspendió este jueves la aplicación de una inyección letal a un condenado por un tiroteo en 1999, debido a problemas para acceder a sus venas.
El comisionado correccional de Alabama, John Hamm, declaró que los funcionarios de la prisión cancelaron la ejecución después de determinar que "no se podía acceder a las venas del recluso Alan Miller de acuerdo con nuestro protocolo" antes de la fecha límite de medianoche para poner en marcha la ejecución. Posteriormente, el recluso fue devuelto a su celda, indicó Hamm.
La interrupción de la ejecución se produjo 3 horas después de ser autorizada por el Tribunal Supremo de EE.UU. La decisión levantó una medida cautelar, concedida después de que los abogados de Miller alegaran que el Estado había perdido su documentación para solicitar que la ejecución se llevara a cabo mediante hipoxia de nitrógeno, un método permitido pero nunca antes utilizado en el país.
Miller, de 57 años, declaró que optó por el nitrógeno cuando se distribuyó el formulario en el corredor de la muerte porque no le gustaban las agujas. El hombre fue declarado culpable de matar a 3 personas en un tiroteo en su lugar de trabajo en 1999, lo que le valió la pena de muerte.