Trump pide a la Corte Suprema intervenir en el caso de los documentos de Mar-a-Lago

El expresidente continúa su batalla por hacer nombrar a un agente judicial que revise los documentos clasificados incautados por el FBI.

El expresidente estadounidense Donald Trump solicitó al Tribunal Supremo que intervenga en la disputa sobre los documentos clasificados que el FBI incautó en su residencia de Mar-a-Lago y, en particular, que ordene que sean revisados por un agente judicial (un abogado independiente designado por tribunales para vigilar el correcto cumplimiento de las órdenes judiciales).

La solicitud agrava aún más el enfrentamiento entre el exmandatario y el FBI, que comenzó cuando esa agencia allanó en agosto la mansión del político en Florida y confiscó allí 33 cajas de archivos, en las que se entremezclaban simples recortes de periódicos y revistas junto con documentos secretos y ultrasecretos.

A principios de septiembre, la jueza federal Aileen Cannon, nombrada en el cargo por Trump, aceptó la moción del líder republicano para designar a un agente judicial que revisara los documentos clasificados. Asimismo, prohibió temporalmente al Gobierno de EE.UU. utilizar esos documentos para desarrollar una investigación penal en torno al líder republicano mientras se producía la revisión.

Sin embargo, un tribunal federal de apelaciones se puso del lado del Departamento de Justicia y dictaminó que este podía continuar su investigación penal sobre los documentos, bloqueando así parcialmente la sentencia de Cannon.

Ahora el exjefe de la Casa Blanca alega que el tribunal de apelaciones "carecía de jurisdicción para revisar, y mucho menos para suspender, la orden interlocutoria del Tribunal de Distrito, que disponía el nombramiento de un perito especial". 

"Cualquier límite impuesto a la revisión exhaustiva y transparente de los materiales incautados en el inédito allanamiento de la casa de un presidente erosiona la confianza pública en nuestro sistema de justicia", afirma la solicitud de Trump.

Tres de los actuales nueve jueces del Tribunal Supremo estadounidense fueron designados por Trump durante su mandato.