El jefe del Comité de Investigación de Rusia, Alexánder Bastrykin, instruyó al organismo a abrir una causa penal en relación con las torturas y los asesinatos de civiles en la ciudad ucraniana de Kúpiansk tras ser retomada por las fuerzas de Kiev en el marco de su contraofensiva en la región de Járkov.
El inicio de la investigación se produce luego de que el 9 de octubre el exjefe del regimiento neonazi Azov (organización prohibida en Rusia), Maxim Zhorin, publicara un video en el que se aprecian cadáveres de civiles siendo arrojados en una fosa con las manos atadas. "Civiles. Habrá ajuste de cuentas", escribió. Poco después, tras el polémica generada por las imágenes, afirmó que la grabación fue obtenida del teléfono de un "ocupante".
Sin embargo, el Comité de Investigación indicó que "[el entorno] indica que el video fue grabado recientemente, es decir, mientras la ciudad estaba bajo control de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Los parámetros internos de la grabación muestran que fue filmado la tarde del 9 de octubre. Los hechos mencionados hablan de nuevos crímenes de guerra del régimen de Kiev".
La entidad aseguró que los investigadores tomarán todas las medidas para esclarecer las circunstancias de las muertes, así como llevar ante la Justicia a los responsables.
Sin consecuencias a nivel global
Por su parte, el jefe adjunto del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, criticó que no habrá consecuencias para Ucrania a nivel global, porque "ninguna organización internacional está a la altura para encargarse de tales tareas", dado que son los países occidentales los que moldean la agenda en tales entidades. "Pero no significa que el crimen perpetrado no sea investigado. Lo será", prometió el expresidente ruso en comentarios a la periodista Nadán Fridrijsón.
Mientras, Maxim Grigoriev, miembro de la Cámara Pública (órgano consultivo ruso), recordó en declaraciones al diario Vzglyad que los asesinatos de civiles son una "práctica constante" de Kiev, ya que sus formaciones "hicieron lo mismo en 2015-2016 en las localidades que estaban bajo control de Ucrania en el Donbass".
Asimismo, destacó que la aparición del video en la Red evidencia que los responsables de las atrocidades se sienten impunes. "Ciertamente, estos son crímenes de guerra directos que deben ser procesados", remarcó.
- A mediados de septiembre, las autoridades interinas de la provincia de Járkov designadas por Rusia denunciaron represiones contra los civiles de dicha región. En particular, se informó que en Kúpiansk mercenarios viajaban y fusilaban a gente, grabándolo con cámaras para luego presentar los crímenes como obra de los efectivos rusos.
- Tras retomar el control sobre ciudades y localidades de la provincia de Járkov, las autoridades ucranianas procedieron a realizar actividades de filtración en las localidades para identificar a "colaboradores y traidores".