La Administración del presidente de EE.UU., Joe Biden, empujó al mandatario ucraniano Vladímir Zelenski a que se muestre dispuesto a las posibles negociaciones de paz con su homólogo de Rusia, Vladímir Putin, informa el diario estadounidense Politico citando fuentes familiarizadas con el asunto.
Esta semana, Zelenski enumeró cinco condiciones para llevar a cabo las conversaciones y de la lista excluyó el punto sobre la imposibilidad de negociar con Moscú mientras Putin se encuentre en el poder, como exigía hasta ahora.
Según las fuentes mencionadas, el cambio se produjo tras los intercambios realizados entre Kiev y Washington, incluyendo la reciente visita a Ucrania por parte del asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan. Los funcionarios estadounidenses no le dijeron directamente a Zelenski ni a sus asesores que cambiaran de postura, pero les transmitieron que el Gobierno ucraniano debe mostrar voluntad de poner fin al conflicto por medios pacíficos.
¿Rusia no quiere resolver el conflicto?
El objetivo es mostrar al mundo de que es Ucrania la que supuestamente quiere resolver el conflicto y no Rusia, señala Politico. "Eso no significa que deban sentarse a la mesa de negociaciones ahora mismo. Ni siquiera creemos que ahora sea el momento adecuado" para ello, dijo uno de los funcionarios citados.
El Gobierno ruso en reiteradas ocasiones se ha manifestado públicamente a favor de iniciar negociaciones con Ucrania, y así lo reiteró Vladímir Putin a finales de octubre, señalando que la "palabra decisiva" para las autoridades ucranianas la tiene Washington. "Este problema es muy fácil de resolver: dar la señal adecuada a Kiev para que cambie su postura y trate de resolver estos problemas por la vía pacífica", puntualizó.
Por otro lado, los demócratas y los republicanos han presionado en las últimas semanas a la Administración Biden para que busque una solución diplomática al conflicto. Además, Zelenski anunció sus nuevas condiciones justo antes de las elecciones de medio término en EE.UU., en las que los republicanos podrían recuperar el control de al menos una de las dos cámaras del Congreso, lo que pondría en peligro un mayor apoyo financiero y militar para Ucrania, concluye el diario.
- Poco después del inicio de la operación militar especial de Rusia en Ucrania, las partes celebraron varias rondas de conversaciones.
- A finales de marzo, Kiev afirmó su disposición a cumplir con las principales exigencias de Moscú, pero luego las negociaciones se estancaron por la negativa de Ucrania a reanudar el diálogo.
- El cambio de postura del Gobierno ucraniano coincidió con la llegada a Kiev del entonces primer ministro británico Boris Johnson y las promesas de países occidentales de proporcionarle asistencia económica y más ayuda militar.