El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, ha instado a Kiev a ser cuidadosa en sus comentarios sobre Rusia después de que el presidente ucraniano Vladímir Zelenski casi inmediatamente acusara a Moscú de la caída del misil en territorio polaco cerca de la frontera con Ucrania, que dejó dos víctimas mortales.
Cuando este martes aparecieron los primeros informes sobre el incidente, el presidente estadounidense, Joe Biden, se encontraba en la isla indonesia de Bali, donde asistía a la cumbre del G20. Según CNN, que cita funcionarios familiarizados con el asunto, mientras que en plena noche, debido a la diferencia horaria, Biden intentaba aclarar la situación que podía convertirse en la causa de un conflicto directo entre la OTAN y Moscú, discutiéndola con el presidente polaco, el secretario de Estado, Antony Blinken, y Sullivan comenzaron a hablar con sus homólogos del país europeo.
Tras varias horas estudiando los datos, como dijo un funcionario estadounidense, "en contra de los peores temores" de las autoridades del país, se conoció que según la información preliminar Rusia no había atacado deliberadamente a Polonia y que existía una alta probabilidad de que fuera un misil proveniente de la defensa antiaérea ucraniana.
A pesar de que la situación era muy seria y podía provocar la activación del artículo 5 de la OTAN sobre la defensa colectiva e iniciar una guerra con Rusia, el líder ucraniano al igual del canciller Dmitri Kuleba culparon a Moscú y exigieron una respuesta rápida, "dura y a nivel de principios". Estas declaraciones hicieron que Washington instara a Kiev a dejar de hacer acusaciones no confirmadas.
Así, según fuentes familiarizadas con el asunto, Sullivan rápidamente llamó a la oficina de Zelenski e instó a los funcionarios a ser más cuidadosos con la forma en que se referían al incidente. Además, se informa que, a pesar de las peticiones de Zelenski para mantener una conversación telefónica con Biden, los mandatarios no hablaron.
Cabe destacar que este jueves durante un discurso en Bloomberg New Economy Forum, el líder ucraniano decidió ser cauteloso, por lo que al ser consultado sobre la pertenencia del proyectil, dijo que Kiev "no lo sabe al 100 %".
"En primer lugar, todo el mundo tiene que entender que ese día lanzamos unos 100 misiles [...] No sé qué pasó esta vez, no lo sabemos al 100 %, tampoco creo que el mundo lo sepa al 100 %. Pero estoy seguro de que hubo un misil ruso y usamos misiles de defensa aérea, pero no podemos decir específicamente que fue [un misil] de defensa de Ucrania", afirmó, añadiendo que "hasta que no termine la investigación no se puede decir qué tipo de misil era".