El Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania ha impuesto medidas restrictivas contra siete sacerdotes de la Iglesia ortodoxa ucraniana perteneciente al Patriarcado de Moscú, cuyo clero y seguidores han sido objeto de persecución por parte de las autoridades durante los últimos años y han sufrido allanamientos en sus propiedades durante las últimas semanas. El decreto correspondiente fue firmado el domingo 11 de diciembre por el presidente del país, Vladímir Zelenski.
Las sanciones, que se imponen por un periodo de 5 años, incluyen: bloqueo de activos; restricción de las operaciones comerciales; cese completo del tránsito de recursos a través del territorio ucraniano; prohibición de retirada de capitales de Ucrania; privación de premios estatales; prohibición de poseer parcelas de tierra, entre otras.
Además, el Ministerio de Asuntos Exteriores ucraniano informará a "las autoridades competentes de la UE, EE.UU. y otros Estados sobre la imposición de las sanciones y planteará con ellos la cuestión de la introducción de medidas restrictivas similares".
La medida sigue a la decisión del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de prohibir las actividades de "organizaciones religiosas afiliadas a los centros de influencia de la Federación Rusa", aprobada por Zelenski a principios de este mes. El mandatario subrayó que las autoridades ucranianas pretenden "garantizar la completa independencia de su Estado, en particular, la independencia espiritual".