Ministro británico asegura que el aumento salarial para enfermeros "avivaría" la inflación

Trabajadores de varios sectores del país, incluyendo los servicios postales y de salud, han iniciado huelgas para exigir incrementos en sus sueldos.

Los aumentos salariales para enfermeros del Reino Unido "avivaría" la inflación y tendrían un "gran impacto" en las finanzas públicas, dijo el canciller del ducado de Lancaster, Oliver Dowden, a Sky News.

Según el ministro, el Gobierno está "decidido" a enfrentar a los sindicatos y seguir con las recomendaciones de los organismos independientes de revisión de sueldos, que sugirieron un aumento salarial para los enfermeros de alrededor del 4 %, muy por debajo de las demandas, a pesar de la posibilidad de otras manifestaciones en enero.

El jueves se llevó a cabo la primera huelga de enfermeros británicos en sus 106 años de historia para reclamar un aumento salarial del 17,6 %, un 5 % por encima del nivel de la inflación, y se espera que una segunda se realice el martes 20 de diciembre. Pat Cullen, secretaria general del Colegio Real de Enfermería (RCN, por sus siglas en inglés), sugirió que las huelgas podrían haberse suspendido a cambio de negociaciones salariales.

Por su parte, Dowden aseguró que otorgar el aumento salarial le costaría a cada hogar del Reino Unido alrededor de 1.000 libras esterlinas (1.200 dólares) adicionales al año e instó a los trabajadores descontentos que incluyen enfermeras, paramédicos y personal ferroviario — a suspender las manifestaciones y "dar un descanso a las familias esta Navidad".

"Me encantaría poder sentarme aquí ahora y decirles a todos sus televidentes, y particularmente a los enfermeros, les daremos un aumento salarial del 19 %", comentó el alto funcionario, señalando que resulta imposible hacerlo debido a "los costos para las finanzas públicas" y el riesgo de impulsar la inflación.

Asimismo, explicó que los ministros están siendo "razonables" y destacó que están "decididos en términos de proteger las finanzas públicas en general".

Con huelgas programadas para los días antes de Navidad, el Gobierno del Reino Unido optó por desplegar a 1.200 militares para prestar apoyo a diversos servicios de emergencia y vigilar las fronteras. Mientras que, tanto jefes sindicales como funcionarios militares han expresado su preocupación, ya que el ejército "no sustituye" al personal de ambulancias calificado, y consideran que incorporar personal "sin capacitación" sería un "obstáculo" en lugar de una ayuda.