El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, expresó este jueves en la Conferencia Anual de la Confederación de Empresas Noruegas que el suministro de armas a Ucrania acerca el final del conflicto armado.
Stoltenberg argumentó que la mayoría de los conflictos armados finalizan en "una mesa de negociaciones" y probablemente el conflicto en Ucrania también lo hará. "Lo que los ucranianos puedan conseguir en la mesa [de negociaciones] depende de su fuerza en el campo de batalla", subrayó.
"Así que si queremos una solución de paz negociada, en la que Ucrania sobreviva como país democrático independiente en Europa, la forma más rápida de conseguirlo es apoyar a Ucrania", destacó el jefe de la Alianza Atlántica.
El alto funcionario concluyó que "las armas son, de hecho, el camino hacia la paz".
Por su parte, el expresidente de Rusia y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad del país, Dmitri Medvédev, comentó las declaraciones de Stoltenberg con una cita de la novela distópica de George Orwell '1984'. "De hecho, 'el pasado había sido borrado, se había olvidado que había sido borrado y de ese modo la mentira se convertía en verdad'", escribió Medvédev en su cuenta de Twitter.
Desde Moscú han declarado reiteradamente que el suministro de armas a Kiev por Occidente solo prolonga el conflicto y aumenta el número de víctimas. La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova, denunció este miércoles que las entregas de armas "multiplican las víctimas, incluso entre la población civil de Donbass, y retrasan el final del conflicto", aumentando el riesgo de "arrastrar a los países de la OTAN a un enfrentamiento militar directo con Rusia".
"No obstante, los patrocinadores occidentales de Kiev [...] no tienen intención de parar, y por el contrario, están intensificando las entregas", criticó.