El presidente estadounidense, Joe Biden, no tiene intención de visitar la localidad de East Palestine, en el estado de Ohio, que sufre las consecuencias del derrame tóxico provocado por el descarrilamiento de un tren a principios de este mes.
En un encuentro con periodistas este viernes, se le preguntó a Biden si tiene planes de visitar la localidad, cuyos habitantes se quejan de problemas de salud tras el derrame. "En este momento, no", dijo.
Al mismo tiempo, defendió la respuesta de su Administración al incidente. "Estuvimos allí dos horas después de que el tren descarrilara, dos horas. He hablado con todas y cada una de las figuras importantes tanto en Pensilvania como en Ohio, así que la idea de que no estamos implicados simplemente no existe. Al principio no se me pidió que acudiera ni siquiera antes de mi viaje a Kiev, así que lo estoy siguiendo muy de cerca. Hacemos todo lo que podemos", afirmó.
Anteriormente, la reacción de la Casa Blanca a la catástrofe provocó una ola de críticas por parte de los habitantes locales, entre ellos el alcalde de East Palestine, Trent Conaway, que criticó a Biden por viajar a Ucrania y entregar millones de dólares en lugar atender los desastres de su propio país. El mandatario también fue criticado por altos funcionarios republicanos, incluido el expresidente Donald Trump.
El miércoles, Trump llegó al lugar de los hechos y expresó su apoyo a los residentes de East Palestine y las comunidades cercanas de Ohio y Pensilvania, declarando que "no están olvidados". Además, acusó a Biden y a la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) de no tener la intención de enviar ayuda federal y criticó su apoyo ilimitado a Kiev mientras su propio pueblo se encuentra en tal situación. "Sinceramente espero que cuando sus representantes y todos los políticos vengan aquí, incluido Biden, y regrese de su gira por Ucrania, les quede algo de dinero", dijo.