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Embajador de EE.UU. en México afirma que Tamaulipas es "un riesgo" y apunta contra cártel del Golfo
Las declaraciones surgen después del secuestro de 4 estadounidenses en esa entidad, dos de los cuales aparecieron muertos.
El embajador de EE.UU. en México, Ken Salazar, lamentó la muerte de dos estadounidenses que habían sido secuestrados junto a otras dos personas el pasado 3 de marzo, en la ciudad mexicana de Matamoros (Tamaulipas), e hizo un llamado para aumentar la cooperación entre los dos países para combatir al crimen organizado.
"Lamentamos los asesinatos de los dos ciudadanos estadounidenses en Matamoros, Tamaulipas, y nos unimos a la pena de sus seres queridos", escribió en un comunicado.
En esa línea, Salazar destacó que Tamaulipas representa "un riesgo por los alto niveles de criminalidad y violencia", tras dejar en claro la preocupación de Washington por "el control que ejerce el cártel del Golfo en la zona conocida como la frontera chica".
"Estos hechos de violencia son un trágico recordatorio que nos exige reafirmar el compromiso de nuestros gobiernos para asegurar nuestra frontera compartida y fortalecer el combate a las organizaciones criminales trasnacionales. Sabemos que es posible, y lo tenemos que lograr, ya que de ello depende el bienestar de nuestros ciudadanos", agregó.
El diplomático destacó que este caso muestra que "es crucial mantener una estrecha colaboración" entre ambos gobiernos.
Una detención
El martes, durante el operativo de rescate, las autoridades mexicanas encontraron a cuatros ciudadanos estadounidenses secuestrados, dos de ellos sin vida, uno herido y otros que resultó ileso. Durante los hechos, una mujer mexicana murió por una bala perdida.
Las autoridades mexicanas entregaron el mismo martes a los ciudadanos rescatados con vida, identificados como Latavia McGee y Eric Williams, a las autoridades de EE.UU.
Por su parte, las autoridades de México informaron sobre la detención del primer sospechoso en el caso. Se trata de José Guadalupe 'N', de 24 años, y fue arrestado mientras custodiaba a los rehenes en una casa de seguridad en Matamoros (Tamaulipas), en un área presuntamente controlada por el Cártel del Golfo.
Irving Barrios Mojica, fiscal general de Justicia de Tamaulipas, afirmó que se sospecha que el secuestro se originó por "una confusión" y no por una "agresión directa", aunque no se descarta ninguna posibilidad.
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