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Activistas radicales se apoderan de un templo de la Iglesia ortodoxa canónica ucraniana
Después de que los asaltantes cortaran las cadenas e irrumpieran en la catedral, la Policía hizo un pasillo para la multitud de partidarios de la PTsU.
Activistas radicales, partidarios de la Iglesia ortodoxa de Ucrania (PTsU, por sus siglas en ruso), promovida por Kiev, han vuelto a asaltar y apoderarse de un templo perteneciente a la Iglesia ortodoxa ucraniana del Patriarcado de Moscú (UPTs), situado en la región ucraniana de Jmelnitski.
De acuerdo con un comunicado de la Iglesia canónica, una multitud irrumpió este sábado en la catedral de San Miguel de la ciudad de Shepetovka. Al entrar en el templo, los radicales "exigieron agresivamente a los fieles de la UPTs que dejaran de rezar, tras lo cual comenzaron a aplaudir con fuerza y a gritar sus consignas".
Medios locales señalan que la mayoría de los feligreses de la institución religiosa canónica, junto con el obispo, estaban en el parvis de la catedral e intentaron defenderla, mientras que algunos creyentes se encerraron en el interior y rezaron.
Sin embargo, como suelen hacer los radicales ucranianos, un grupo de cinco hombres uniformados cortó las cadenas e irrumpió en el templo. Posteriormente los asaltantes derribaron las puertas de la catedral desde dentro, y la Policía hizo un pasillo para la multitud de partidarios de la PTsU.
Las tomas de templos por la fuerza se han convertido en algo habitual en Ucrania. Así, el miércoles, un grupo de hasta 50 personas intentó apoderarse de la Catedral de San Jorge, situada en la ciudad de Lvov. Los asaltantes invadieron el territorio de la iglesia e interrumpieron la divina liturgia, además de bloquear las entradas. Posteriormente se inició una reunión sobre la transición de la parroquia del templo a la PTsU, que promueve Kiev. Sin embargo, según la Iglesia canónica, la parroquia de la catedral no tomó ninguna decisión de unirse a los cismáticos.
Los hechos tienen lugar mientras continúa la persecución masiva por parte de las autoridades ucranianas contra la Iglesia ortodoxa canónica del país, en el centro de la cual se encuentra el Monasterio de las Cuevas de Kiev. A finales de marzo, las autoridades ucranianas solicitaron que los monjes abandonaran el lugar, pero los clérigos se negaron a hacerlo.
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