El sector inmobiliario de EE.UU. se enfrenta actualmente a un "enorme 'muro de refinanciación': más de la mitad de los 2,9 billones de dólares en hipotecas comerciales se refinanciarán en los próximos dos años", advirtió a principios de esta semana la directora de inversiones del importante banco estadounidenses Morgan Stanley, Lisa Shalett.
Según esta experta, incluso si las tasas actuales se mantienen donde están, "es probable que las nuevas tasas de préstamo sean entre un 3,5 % y un 4,5 % más altas que las hipotecas existentes de bienes raíces comerciales".
Al mismo tiempo, Shalett indica que los precios de las propiedades comerciales ya han bajado, y "los analistas de Morgan Stanley pronostican que los precios podrían caer hasta un 40 %, rivalizando con la caída que hubo durante la crisis financiera de 2008". La directora de inversiones también ha advertido de que este tipo de desafíos pueden perjudicar no solo a la industria de bienes raíces, "sino también a comunidades comerciales enteras relacionadas con ella".
Estos pronósticos vienen en medio de la crisis bancaria en EE.UU. que se desató después de la quiebra y cierre de varios importantes prestamistas, Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank. En este contexto, los préstamos bancarios en EE.UU. se redujeron en 105.000 millones de dólares en las últimas dos semanas de marzo: la mayor caída en préstamos desde 1973.