Congresista acusado de fraude en EE.UU. confiesa una estafa de cheques falsos en Brasil para no ir a juicio
El congresista republicano por el estado de Nueva York George Santos, que es objeto de una serie de investigaciones desde hace varios meses, firmó el jueves un acuerdo con fiscales en Brasil en el que confesó un fraude con uso de cheques falsos cometido hace 15 años para evitar ser enjuiciado.
Jonymar Vasconcelos, abogado de Santos, confirmó a AP que el legislador, de 34 años, accedió a pagar una restitución y multas si los fiscales acuerdan retirar el caso penal en su contra.
"Lo que habría sido el comienzo de un caso terminó hoy", dijo Vasconcelos, en una breve entrevista. "Mi cliente ya no afronta ningún cargo en Brasil", agregó, sin dar más detalles sobre el acuerdo, argumentando que el caso procedió bajo secreto.
Santos compareció virtualmente ante la audiencia del tribunal penal, que se celebró en Niterói, en Río de Janeiro, y en la que se le dieron 30 días para pagar alrededor de 2.000 dólares en multas y 2.800 dólares a la víctima del delito, informó el diario brasileño Folha de Sao Paulo.
El caso se remonta a 2008, cuando el legislador fue acusado de usar cheques robados y sin fondos para comprar ropa y zapatos por un valor de 2.144 reales brasileños, que entonces equivalían a unos 1.350 dólares, según la acusación presentada por los fiscales en 2011. Sin embargo, el caso fue archivado en 2013. En enero de este año, la justicia de Río de Janeiro reabrió el caso después de que Santos fuera elegido congresista en EE.UU. y The New York Times expusiera que había mentido sobre su currículum.
Fraude, lavado de dinero y robo de fondos públicos
El pasado miércoles, el congresista fue detenido en Nueva York, EE.UU., donde está acusado formalmente de 13 cargos por estafar a posibles partidarios políticos blanqueando fondos para pagar sus gastos personales y recibiendo ilegalmente prestaciones de desempleo mientras tenía trabajo. Además, se le acusa de hacer declaraciones falsas a la Cámara de Representantes sobre sus ingresos, sus activos y pasivos.
Santos se declaró inocente y horas después fue liberado tras pagar una fianza de 500.000 dólares.