China rechazó este domingo los comentarios del secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, sobre el aniversario de las protestas en la plaza de Tiananmén de Pekín el 4 de junio de 1989 y puso en evidencia el doble rasero estadounidense.
"¿Qué hace que el Departamento de Estado de EE.UU. y Antony Blinken piensen que pueden criticar la situación de los derechos humanos de otros países cuando no pueden proteger a los más de 40.000 estadounidenses asesinados por violencia con armas solo el año pasado?", escribió la portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Hua Chunying, en su cuenta de Twitter. "¿No son el derecho a la vida y la libertad del miedo los derechos humanos primarios?", enfatizó.
"Señalar con el dedo a otros no mantendrá a los estadounidenses seguros y libres de miedo", agregó la funcionaria. "La vida feliz que disfruta el pueblo chino y la perspectiva de un futuro aún mejor que estamos abrazando es la mejor respuesta de China a esas desagradables declaraciones", concluyó.
"Mañana se cumple el 34.º aniversario de la Masacre de la Plaza de Tiananmen. Continuamos honrando y defendiendo los derechos de aquellos en la República Popular China que han sido silenciados y la memoria de aquellos que valientemente se levantaron para exigir sus libertades fundamentales", rezaba el mensaje que Blinken publicó este sábado en sus redes sociales.
En tanto, en un clima de crecientes tensiones entre Washington y Pekín, el subsecretario de Estado para Asuntos de Asia Oriental y el Pacífico, Daniel Kritenbrink, viajará a China la próxima semana, para "debatir cuestiones clave de la relación bilateral", según un comunicado de las autoridades estadounidenses.
La visita de Kritenbrink sigue a los informes sobre un viaje secreto a China del director de la CIA, William Burns, el mes pasado, y una reunión entre el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., Jake Sullivan, y el jefe de la diplomacia china, Wang Yi, en Austria, también en mayo, como parte de los esfuerzos de la Casa Blanca para reforzar la comunicación y apaciguar las tensas relaciones con el gigante asiático.