El volcán Mayón, el más activo de Filipinas, muestra cada vez más signos de erupción, lanzando lava y gas sulfúrico desde la semana pasada, lo que ha llevado a evacuar a los residentes alrededor de la zona, informa el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs, por sus siglas en inglés).
Hasta ahora se han registrado 21 terremotos volcánicos débiles y 260 desprendimientos de rocas, así como flujo de lava en el volcán.
La alerta de peligro se elevó a nivel 3, en una escala de 5. En los últimos días se han evacuado 14.000 personas, el radio de seguridad alrededor del volcán ha aumentado de 6 a 7 kilómetros y, si crece el riesgo de erupción, se espera que la alerta llegue a nivel 4 y se evacuen 20.000 personas, aseguró el gobernador de la provincia de Albay, Edcel Greco Lagman.
El Phivolcs advirtió que una erupción peligrosa es posible dentro de algunas semanas o incluso días, señalando que las caídas de rocas y escombros y las erupciones leves con lava son cada vez más seguidas desde inicios de junio.
Las autoridades de aviación también recomendaron a los pilotos no volar cerca a la cima del volcán, pues las erupciones repentinas pueden ser peligrosas para las aeronaves.
El director de Phivolcs, Teresito Bacolcol, en entrevistas con medios locales, aseguró que el lunes hubo una erupción repentina, pero por ahora no es necesario aumentar el nivel de alerta.
El gobernador recomendó a los turistas que están llegando a la provincia para ver el espectáculo natural que lo hagan a una distancia prudencial. "En una distancia, digamos, a pocos kilómetros de las zonas de peligro, ellos podrán ver perfectamente este intrincado fenómeno", declaró.