El turista acusado por la Policía italiana de garabatear la semana pasada en una pared del Coliseo de Roma su nombre y el de su novia ha enviado una carta de disculpa a las autoridades de la ciudad, asegurando que no se dio cuenta del valor histórico del monumento, construido en el siglo I, informa Il Messaggero.
"Consciente de la gravedad del acto cometido, quisiera con estas líneas expresar mis más sinceras y honestas disculpas a los italianos y al mundo entero por el daño causado a un bien que, de hecho, es patrimonio de toda la humanidad", escribió Ivan Danailov (Dimitrov, según otras fuentes), de 31 años, en su misiva, dirigida a la Fiscalía, el Ayuntamiento y el propio alcalde de Roma.
Al mismo tiempo, el turista intentó justificar su inscripción "Ivan + Hayley 23" con su total ignorancia acerca del Coliseo. "Admito con la más profunda vergüenza que solo después de lo lamentablemente sucedido me enteré de la antigüedad del monumento", alegó.
Ahora, su supuesto desconocimiento de la historia de la antigua Roma y de la atracción turística más emblemática de la ciudad podría costarle de dos a cinco años de cárcel y una multa de entre 2.500 y 15.000 euros, mientras está siendo investigado por daños a bienes culturales, detalla el medio.
El abogado de Danailov, Alexandro Maria Tirelli, dijo que su representado no era plenamente consciente de la ilegalidad de su acto.
"El joven es el prototipo del extranjero que cree despreocupadamente que todo está permitido en Italia, incluso el tipo de acciones que serían severamente castigadas en su país de origen", afirmó el letrado. "Consideré esencial hacer comprender a nuestro cliente el valor moral de una carta de disculpa a nuestra comunidad nacional y a las instituciones de la ciudad. Sobre esta base, esperamos llegar a un acuerdo con el fiscal Nicola Maiorano para la aplicación de una pena moderada y justa", agregó.
Actualmente, Danailov se encuentra en la ciudad británica de Keynsham, su lugar de residencia, adonde regresó después de su acto de vandalismo, que fue grabado en video por otro turista y difundido en las redes sociales, donde generó una oleada de comentarios de indignación.