Durante el año que estuvo vigente el acuerdo de granos, el régimen de Kiev ha acumulado "importantes capacidades militares-industriales, de combustible y de almacenamiento" en las zonas de sus puertos en el mar Negro, denunció este viernes Dmitri Polianski, representante permanente adjunto de Rusia ante la ONU.
Los puertos ucranianos también "albergaban importantes recursos humanos de las Fuerzas Armadas de Ucrania y mercenarios extranjeros", afirmó el alto diplomático.
"Con la finalización del acuerdo, tenemos la oportunidad de arreglar esta situación. Consideramos que la infraestructura portuaria de Ucrania es un lugar de despliegue y reabastecimiento de sus tropas con armamento occidental", agregó.
Asimismo, Polianski señaló que, desde el 19 de julio, las tropas rusas realizan ataques contra instalaciones industriales militares, infraestructuras de almacenamiento de combustible y depósitos de municiones del Ejército ucraniano en las cercanías de las ciudades de Odesa y Nikoláyev. "Todos estos objetos están siendo destruidos con éxito", aseguró.
Este lunes, el acuerdo de granos quedó sin efecto. El Ministerio de Exteriores de Rusia detalló que Moscú se opone a la prórroga del acuerdo debido al incumplimiento de las obligaciones estipuladas en el documento y a la discordancia de la iniciativa con los fines planteados.
En este contexto, el Ministerio de Defensa ruso anunció este miércoles que, a partir del 20 de julio, los buques que naveguen por el mar Negro con destino a puertos ucranianos serán considerados posibles portadores de carga militar. Según el organismo, en esos casos se estimará que los países de la bandera de dichas embarcaciones participan en el conflicto del lado ucraniano.