EE.UU. "no tiene derecho a mandar" en los asuntos del disputado mar de la China Meridional, según afirmó Wu Quian, portavoz del Ministerio de Defensa chino.
La declaración se produce después de que Washington expresara su apoyo a Filipinas por los hechos que tuvieron lugar el pasado sábado, cuando un barco de la Guardia Costera china usó un cañón de agua contra un buque filipino que presuntamente llevaba combustible, comida y agua a tropas cerca del banco de arena Ayungin, en el grupo de islas Spratly, situado en el disputado mar.
Washington tachó esa maniobra de amenaza directa "para la paz y estabilidad regional". Mientras tanto, desde la Cancillería china destacaron que "la acción de la parte filipina violó la soberanía de China", y, en respuesta, la Guardia Costera del gigante asiático "la detuvo de acuerdo con la ley y tomó medidas en cumplimiento de la Ley de Advertencia".
"Ignorando los hechos, EE.UU. acusó sin fundamento a China", dijo Wu Qian, agregando que el país norteamericano "no es parte en el asunto del mar de la China Meridional y no tiene derecho a mandar en esta cuestión".
Además, instó la Administración Biden a dejar de usar el asunto para "sembrar discordia" y a "respetar seriamente la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos" de Pekín.