La razón por la que Petro ordenó que no haya más policías y soldados jóvenes en el Cauca

Cuatro policías han sido asesinados en el departamento del Cauca, lo que obligó al Gobierno a convocar un consejo de seguridad estatal donde se definieron las acciones destinadas a parar la violencia en esa entidad colombiana con salida al Pacífico, en la que grupos armados se disputan el control de las rentas ilícitas.

Entre las disposiciones presidenciales que buscan alcanzar la paz en ese departamento surcado por décadas de violencia, se encuentra el reforzamiento de la presencia militar y policial, que deberá estar compuesta por personal profesional y experto.

Además, el jefe de Estado, Gustavo Petro, ha pedido que haya una relación armónica entre las Fuerzas Militares y el campesinado para lograr transformar las economías ilícitas en lícitas, es decir, sustituir la producción de coca por café.

¿Cuál es la propuesta del Gobierno?

El presidente ha planteado que debe haber una "sustitución con dinero público de las economías ilícitas", para transitar de las zonas de producción cocalera a cafetera.

El mandatario adelantó que el Ejército "será el eje central de esa política", que espera que sea apoyada por los campesinos, los movimientos sociales, indígenas y afro, "para salir de la base económica de la violencia en ese departamento".

"Es un plan político-militar, porque la acción militar se hace con base en un objetivo político: el cambio de la economía para alcanzar la paz", aseveró.

Nuevamente pidió que, más que un cese al fuego, haya uno de hostilidades, lo que comprende ponerle fin al secuestro, la extorsión, las masacres y el asesinato de líderes sociales y excombatientes.

No más policías y soldados jóvenes

Asimismo, Petro ordenó que en la cabeceras municipales, donde habrá presencia de la Fuerza Pública, se retiren a los bachilleres de la Policía y a los soldados regulares, con la finalidad de que operen uniformados con experiencia en manejo de ese tipo de conflictos.

Con esa estrategia, "dejan de haber bachilleres de la Policía en esta zona, dejan de haber soldados regulares", dijo el mandatario.  

"El Ejército y la Policía pasa a ser profesional para disminuir la vulnerabilidad y aumentar la eficacia", agregó.

Ya en septiembre pasado, el mandatario había hecho la misma petición en el departamento del Huila, donde fueron asesinados siete policías, al pedir que se sacaran de ese lugar a los auxiliares de ese cuerpo de seguridad porque, a su juicio, los jóvenes de entre 18 y 20 años no podían estar en sitios de alto riesgo.

La situación en el Cauca

En el Cauca, ubicado en el suroeste de Colombia, confluyen distintos intereses que han generado conflictos y afectaciones de vieja data entre la población de ese territorio. 

En esa entidad conviven las luchas históricas por la tierra por parte de campesinos, indígenas y población afro; megaproyectos de explotación minera; y grandes cultivos de marihuana y cocaína.

Además, hay presencia de disidencias guerrilleras, grupos narcoparamilitares y sicarios al servicio de quienes ejercen el poder en las mineras.

En el último fin de semana se desató una ola de violencia en dos puntos distintos del Cauca que dejó a cuatro uniformados muertos.

Los primeros hechos ocurrieron el pasado sábado, cuando fueron asesinados los policías Michael León, José Orozco y Eimy Marllely Rodríguez mientras se encontraban en un puesto de control en el municipio Morales. 

En el ataque se emplearon una granada y armas de fuego. Se presume que fue perpetrado por una de las disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), recoge El Tiempo.

Un día después, el subintendente Carmelo José García Gómez murió luego de que un carro bomba estallara en la subestación del corregimiento de Timba, en el municipio de Buenos Aires, en el Cauca, según El Espectador.