El conflicto entre Rusia y Ucrania "está presionando a países de todo el mundo", declaró el secretario de Asuntos Exteriores del Reino Unido, James Cleverly, en una entrevista al medio The House publicada este sábado.
Cleverly reconoció el cansancio acumulado del conflicto, lo que constituye un "gran problema" y es algo que los socios de Kiev "tienen que afrontar". En este contexto, reiteró el llamado a seguir con la ayuda de todo tipo a Ucrania para evitar una victoria de Rusia.
"Si no mantenemos nuestra ayuda a Ucrania, si enviamos la señal de que los agresores pueden prosperar, entonces todos los problemas a los que hacemos frente ahora —las presiones inflacionarias sobre los alimentos y el combustible, la presión política que se genera debido a un conflicto como este— se empeorarán", dijo.
"Es por eso que la postura del Gobierno del Reino Unido es firme. Así se lo decimos a todos nuestros socios internacionales. Esto es duro y doloroso. Pero si vacilamos será más duro y más doloroso", agregó el canciller británico.
Respecto a la posible reelección en EE.UU. del republicano Donald Trump, quien ha prometido lograr la paz en Ucrania en 24 horas, Cleverly dijo: "¿cómo podría alguien no querer que eso ocurriera?". En este sentido, reconoció que el "particular estilo" del político estadounidense "puede ser sorprendentemente eficaz", refiriéndose a la normalización de las relaciones entre Israel y varios países árabes.
Relaciones con China
Por otra parte, el canciller británico abordó las relaciones con China en medio de los replanteamientos de la retórica de Occidente hacia el gigante asiático. En los últimos meses, los países occidentales se han puesto de acuerdo sobre una parte central de su enfoque económico y de seguridad respecto a Pekín, centrándose en la "reducción de riesgos" y no en la "desvinculación".
Según Cleverley, los países occidentales no deben "caer en la trampa de creer que inevitablemente" entrarán en un conflicto militar o económico con China.
El alto funcionario puso también en duda el dominio económico de Pekín, al afirmar que en esta cuestión "no hay nada inevitable". Cleverly recordó que las estadísticas evidencian que el crecimiento económico "se ha ralentizado" en el país asiático.
Pese a los desacuerdos con China, Reino Unido considera necesario seguir con el diálogo, pero continuará con sus esfuerzos para atender la atención a los problemas de derechos humanos en el país asiático, particularmente en la región de Sinkiang y Hong Kong. Asimismo, el canciller advirtió que "cualquier agresión" contra Taiwán sería un "paso increíblemente estúpido".
Como ejemplo de diálogo con Pekín, Cleverly confirmó que el país asiático estará presente en la cumbre sobre la inteligencia artificial que se celebrará en el país europeo en noviembre. En este contexto, destacó el papel de China como uno de los actores más importantes en esta esfera.