"Lo sabían todo": Lavrov califica de vergonzosas las excusas de Trudeau por honrar a un nazi en el Parlamento de Canadá

El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, este lunes ha calificado de vergonzosas las excusas del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, tras honrar a un veterano nazi ucraniano en el Parlamento de Canadá en presencia del presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski. Lavrov ha sostenido que tanto Trudeau como el presidente de la Cámara de los Comunes, Anthony Rota, y Zelenski conocían el pasado del homenajeado: el veterano de la 14.ª división de Granaderos Waffen-SS o División Galizien, Yaroslav Hunka.

"Creo que cualquier persona razonable se da cuenta de que el caso no pudo ser como intenta presentarlo Trudeau", ha declarado Lavrov, al mencionar que Moscú ya ha comentado "muchas veces la historia del Parlamento canadiense". "Por supuesto que todo el mundo lo sabía. El presidente del Parlamento lo sabía. Los servicios de seguridad lo sabían. El hombre es bien conocido, no ha ocultado sus opiniones al respecto, y mucha gente lo conoce", ha declarado el canciller ruso.

Al referirse a Trudeau, quien ofreció disculpas oficiales en nombre de su Gobierno por la ovación brindada a un veterano nazi ucraniano, el ministro de Exteriores ruso ha señalado que siente "pena por él, al fin y al cabo, se llama primer ministro". "Y cuando él y Zelenski aplaudieron y levantaron el puño en el aire, saludando a ese nazi, por supuesto, lo sabían todo. Pero lo más triste es que Trudeau, que se atrevió a disculparse, ¿se disculpó ante quién? Ante los ucranianos y ante Zelenski, con quien hizo el 'saludo nazi' a ese personaje. Qué vergüenza", ha concluido Lavrov.

Este 22 de septiembe, Zelenski junto con Trudeau y cientos de parlamentarios canadienses, ovacionaron a Yaroslav Hunka, veterano nazi de la Segunda Guerra Mundial "que luchó por la independencia de Ucrania contra los rusos". En este contexto, la portavoz del Ministerio ruso de Exteriores, María Zajárova, también había comentado las disculpas de Trudeau, subrayando la estrecha cooperación entre Ottawa y el Gobierno de  Kiev, que elogia a los ucranianos que colaboraron con los nazis de la Segunda Guerra Mundial.