Corea del Norte señala el "primer objetivo de destrucción" de EE.UU.

"Han quedado atrás los días en los que el derecho a un ataque preventivo era 'monopolio' de Estados Unidos", apunta KCNA.

Pionyang condenó la llegada a Corea del Sur de un bombardero estratégico estadounidense B-52, "el representativo de la aviación norteamericana capaz de cargar armas nucleares", publica este viernes la agencia estatal norcoreana KCNA. 

El medio oficial recuerda a Washington que "la península de Corea está técnicamente en guerra y que cualquier activo estratégico desplegado en el área del lado enemigo se convierte en el primer objetivo en ser destruido".

"Han quedado atrás los días en los que el derecho a un ataque preventivo era 'monopolio' de Estados Unidos", apunta KCNA, haciendo hincapié en que Pionyang "tomará la opción correspondiente" en respuesta a las acciones "provocativas" de Seúl y Washington. 

En este contexto, la agencia aconseja a EE.UU. darse cuenta "lo antes posible de que cuanto más frecuentemente se repita el error de juicio, más desesperadamente se acercará el momento crítico del continente americano".

Cabe recordar que este año las fuerzas estadounidenses y surcoreanas han intensificado sus ejercicios militares conjuntos, en los que participan portaviones, submarinos y bombarderos avanzados de EE.UU., en un esfuerzo de preparación ante las crecientes "amenazas nucleares" y de misiles por parte de Corea del Norte.

Un bombardero estratégico estadounidense B-52 aterrizó este martes por primera vez en Corea del Sur. Es posible que Estados Unidos, Corea del Sur y Japón realicen un ejercicio aéreo conjunto, que consistirá en un vuelo en formación con aviones de combate de los tres países escoltando al B-52, reportó esta semana Yonhap, citando a sus fuentes.

Los bombarderos estratégicos estadounidenses capaces de transportar armas nucleares han sobrevolado anteriormente la península coreana como parte de ejercicios conjuntos. El pasado julio, Pionyang condenó el despliegue estadounidense de capacidades estratégicas en Corea del Sur, advirtiendo que las fuerzas norcoreanas están preparadas para tomar represalias.