El Ejército Zapatista denuncia avance de la violencia narco en Chiapas y reestructura sus territorios

La guerrilla izquierdista anunció una celebración por el 30 aniversario de su levantamiento.

El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) denunció el avance del crimen organizado en Chiapas, al dar a conocer una histórica reestructuración política de sus territorios.

Desde fines de octubre, la guerrilla izquierdista comenzó a publicar una serie de comunicados, firmados en su mayoría por el Subcomandante Moisés. Esta semana, ya llevan 10.

"Después de un largo y profundo análisis crítico y autocrítico, y de consultar a todos los pueblos zapatistas, se decidió la desaparición de los Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas (Marez) y las Juntas de Buen Gobierno", explicó en uno de los escritos, en los que detalló los cambios que tendrá a partir de ahora la organización territorial.

En Chiapas había 27 Marez y 12 Juntas de Buen Gobierno que ahora serán sustituidos por Gobiernos Autónomos Locales. A esas instancias se sumaban los "Caracoles", divisiones regionales que seguirán existiendo, aunque por el momento estarán cerrados a visitantes extranjeros.

Los zapatistas también anunciaron que celebrarán el 30 aniversario del levantamiento que protagonizaron en el sureste mexicano y que conmocionó a México y al mundo.

"Les avisamos que haremos una celebración con motivo de los 30 años del inicio de la guerra contra el olvido. Esto en los meses de diciembre del 2023 y enero del 2024", agregó al dar a conocer pormenores de los festejos.

Sin embargo, advirtió que el viaje puede ser peligroso porque las principales ciudades de Chiapas están sumidas "en un completo caos".

Violencia

"Las presidencias municipales están ocupadas por lo que nosotros llamamos 'sicarios legales' o 'Crimen Desorganizado'. Hay bloqueos, asaltos, secuestros, cobro de piso, reclutamiento forzado, balaceras. Esto es efecto del padrinazgo del gobierno del estado y la disputa por los cargos que está en proceso. No son propuestas políticas las que se enfrentan, sino sociedades criminales", señaló.

Como ejemplo, citó los casos de las ciudades San Cristóbal de las Casas, Comitán, Las Margaritas y Palenque, que aseguró que están en manos de uno de los cárteles y en disputa con otro.

"Esto es constatado por la llamada industria hotelera, turística, restaurantera y de servicios. Quienes trabajan en estos lugares lo saben y no lo han denunciado porque están amenazados y, además, saben que es inútil cualquier petición", dijo.

Del mismo modo, según ese grupo, uno de los principales problemas de la zona es la presunta connivencia de las fuerzas militares y policiales para participar en el "negocio" de la migración, en vez de proteger a la población civil.

"El tráfico y la trata de personas es un negocio de las autoridades que, mediante la extorsión, el secuestro y compraventa de migrantes, se enriquecen desvergonzadamente", afirman en uno de los comunicados.

Autocrítica

En otro de los textos publicados esta semana, el EZLN precisó los objetivos de los cambios que reconfiguran por completo los territorios autónomos.

"Se ha reorganizado la estructura y disposición del EZLN de modo de aumentar la defensa y seguridad de los poblados y de la madre tierra en caso de agresiones, ataques, epidemias, invasión de empresas depredadoras de la naturaleza, ocupaciones militares parciales o totales, catástrofes naturales y guerras nucleares. Nos hemos preparado para que sobrevivan nuestros pueblos, incluso aislados unos de otros", señaló.

En un afán autocrítico, los zapatistas reconocieron que en estas tres décadas cometieron muchos errores, pero también aprendieron a ser autónomos y autogobernarse.

Entre "lo malo", destacaron que la estructura piramidal en la cadena de mando fue alejando a pueblos y autoridades zapatistas, ya que consideran que los mensajes de las Juntas de Buen Gobierno y de las Marez no se transmitían cabalmente y terminaban generando muchos cortes de información.

"Se estaba cayendo ya en querer decidir ya ellas, las autoridades, los quehaceres y las tomas de decisiones. Querían dejar un lado los 7 principios del mandar obedeciendo", sostuvieron tras asegurar que hubo organizaciones no gubernamentales que quisieron imponer proyectos que los pueblos no necesitaban.

En estos años, añadió la organización, también hubo personas que visitaron las comunidades zapatistas y solo ayudaban a familias de las que se hacían amigas. "Y algunos visitantes de plano querían dirigirnos y tratarnos como sus mozos. Y pues con mucha amabilidad teníamos que recordarles que somos zapatistas", advirtieron.