El gobierno de España adquirirá hasta un 10 % de Telefónica para convertirse en el mayor accionista de la compañía y contrarrestar así la adquisición de una participación del 9,9 % de Saudi Telecom (STC), vinculada al fondo soberano de la monarquía árabe.
En un comunicado, el Ministerio de Hacienda destacó el enorme interés estratégico de la compañía y dijo que la medida busca otorgar una "mayor estabilidad accionarial" a la empresa y contribuir a la "salvaguarda de sus capacidades estratégicas" con una "vocación de permanencia".
Con su luz verde a la Sociedad Estatal de Participaciones para que proceda a la adquisición, el gobierno de Sánchez muestra un papel más intervencionista en sectores estratégicos.
"En línea" con otros países
La compra se erige en un contrapeso a la presidencia saudí, que era vista con preocupación en el Ejecutivo. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo de España, Yolanda Díaz, incluso había pedido parar la operación de Saudi Telecom.
El 10 % está valorado en poco más de 2.000 millones de euros y, si se concreta la operación, permitiría al Gobierno español asegurarse un consejero en la cúpula de la empresa, de la que salió hace más de 25 años.
"La entrada en el capital de la compañía va en línea con los países de nuestro entorno. Alemania ostenta un 13,8% del capital de Deutsche Telekom; Francia, dispone de un 13,4% en Orange; o Italia, que ha adoptado en agosto de 2023 un acuerdo para incrementar hasta el 20% su participación en la compañía que agrupa los activos de telefonía fija de Telecom Italia", detalló el gobierno.