Organizaciones sociales y políticas de izquierda realizaron este miércoles la primera manifestación contra las medidas de ajuste del Gobierno de Javier Milei, y denunciaron la "criminalización de la protesta" ante la implementación del nuevo protocolo para liberar las calles de protestas.
Tras la marcha, que se desarrolló bajo un clima de extrema tensión, las agrupaciones que conforman la Unidad Piquetera leyeron un documento en la Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada (sede del Ejecutivo) en rechazo a las políticas económicas de Milei y el operativo represivo encabezado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
"Milei mintió diciendo que el ajuste lo iba a hacer con 'la casta', pero el ajuste lo está pagando el pueblo con más hambre y miseria. Junto con estas medidas, Milei lanza con Patricia Bullrich un protocolo ilegal para prohibir las manifestaciones populares y la protesta social", señala el texto que leyó un dirigente de las organizaciones.
Y añadió: "Decimos no al protocolo, no a la represión, no a la criminalización de la protesta". También hubo criticas al Gobierno de Alberto Fernández y al Fondo Monetario Internacional (FMI).
La manifestación coincidió además con un nuevo aniversario de la represión ocurrida el 19 y 20 de diciembre de 2001, en el marco de una grave crisis económica que significó la caída del gobierno de Fernando De La Rúa.
"Estamos movilizando todos unidos este 20 de diciembre contra el hambre, en defensa del trabajo genuino, los salarios, las jubilaciones, la salud y la educación, de todos nuestros derechos, contra la represión y el ataque a los planes sociales", se lee en el texto.
"En unidad y movilización de los trabajadores ocupados y desocupados, de los organismos de derechos humanos, sociales, estudiantiles, ambientalistas, de género, sindicales y políticos, realizamos la primera gran acción unitaria de lucha contra el ajuste" de Milei y el ministro de Economía Luis Caputo, y el "protocolo represivo de Bullrich", agrega.
La protesta se desarrolló en medio de un inusual despliegue que contó con la actuación de las cuatro fuerzas federales: Policía Federal, Gendarmería Nacional, Prefectura Naval y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), más la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.
Las autoridades reportaron dos detenidos por, presuntamente, agredir a efectivos policiales. Además, hubo choques entre manifestantes y fuerzas de seguridad.
Desde la central de Policía, las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires y nacionales, incluso el presidente Javier Milei, monitorearon con cámaras los puntos clave donde se desarrollaron las concentraciones, con control de vehículos, buses y trenes.
La intención del Gobierno era que la manifestación se diera "en la vereda", algo que, por la magnitud de la convocatoria, no fue posible.
Sin embargo, la ministra Bullrich destacó en una rueda de prensa realizada luego de la marcha que "hubo libre circulación en todo el país". Y destacó el accionar de las fuerzas de seguridad.