El presidente de Paraguay, Santiago Peña, se reunió este lunes con su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en Brasilia, para revisar las condiciones del acuerdo binacional de la represa de Itaipú, la mayor del mundo en generación de energía.
"Es un año excelente tanto para Paraguay como para Brasil, porque finalmente terminamos de pagar la deuda que teníamos por la construcción de Itaipú, hace 50 años", dijo Lula ante la prensa luego del encuentro.
El jefe de Estado brasileño afirmó que se discutió sobre el anexo C del convenio de Itaipú, relativo a las tarifas que Paraguay desea revisar para este año por la energía que vende a Brasil, aunque no se llegó a un acuerdo sobre el tema.
"Le dije al compañero que vamos a rediscutir el tema de las tarifas de Itaipú. Nosotros tenemos divergencia, pero estamos dispuestos a encontrar solución conjuntamente, y en los próximos días vamos a hacer otra reunión", afirmó Lula.
Por su parte, Peña destacó: "Partimos de la base de que ambos países tenemos en común el objetivo de promover el desarrollo de nuestras naciones para beneficio de nuestra gente y apostaremos al diálogo para que, trabajando juntos, podamos lograrlo".
Asimismo, informó que se acordó un nuevo cónclave oficial en Asunción, para seguir discutiendo "estos temas importantes para el futuro" de ambos países.
Los mandatarios abordaron también temas como obras de infraestructura en común y el desarrollo del Mercado Común del Sur (Mercosur), que preside Paraguay durante este primer semestre del año.
Junto a Peña viajaron el canciller Rubén Ramírez; la jefa de Gabinete, Lea Giménez; los ministros de Economía, Carlos Fernández Valdovinos, y de Industria y Comercio, Javier Giménez; y el director general paraguayo de la Itaipú, Justo Zacarías.
Del lado brasileño acompañaron a Lula el ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira; el embajador de Brasil en Paraguay, José A. Marcondes; el secretario de América Latina y el Caribe, Ricardo Monteiro; el embajador Audo Faleiro; y el director general brasileño de Itaipú, Enio Verri.
Asunto pendiente
Los dos mandatarios iban a reunirse en octubre para abrir la negociación sobre la revisión tarifaria del llamado Anexo C de la represa hidroeléctrica Itaipú Binacional, pero ese encuentro se postergó.
Las negociaciones para reformular el acuerdo de Itaipú comenzaron en agosto del año pasado, luego de la asunción de Peña. El dirigente del Partido Colorado planteó la necesidad de una "visión conjunta más ambiciosa" para los próximos 50 años para que Itaipú sea, a la vez, "generador de energía y de desarrollo".
El Tratado de Itaipú, firmado en 1973 y que vencerá el próximo mes de agosto, establecía la construcción de una presa hidroeléctrica conjunta entre Paraguay y Brasil, en la que ambos países tienen derecho al 50 % de la energía generada.
El llamado Anexo C, que debe ser renegociado, establece las condiciones del abastecimiento eléctrico, del costo del servicio de electricidad y de los ingresos. Según lo acordado, a cada país le corresponde un 50 % de la energía que produce Itaipú, y precisa que el excedente que no sea utilizado por una de las partes tiene que ser vendida con derecho preferencial (a precio de costo) al otro Estado. Pero esto puso en una posición desventajosa al país guaraní, ya que durante todo este tiempo se ha visto obligado a vender la energía excedente a Brasil, como decreta dicho acuerdo, a valores irrisorios.
Al ser creada por ambas naciones, la empresa Itaipú Binacional contrajo una deuda para la construcción con el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil, por un valor de 115 millones de dólares. Dicho compromiso financiero terminó de cancelarse en marzo de este año.
La central, solo superada en dimensiones (no en generación de electricidad) por la presa de las Tres Gargantas de China suministra el 95 % de la energía eléctrica que consume Paraguay y el 24 % de Brasil.
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