El movimiento rebelde yemení Ansar Alá (los hutíes) reivindicó la autoría del ataque realizado en el golfo de Adén, este lunes, contra la embarcación de carga seca Gibraltar Eagle.
Fue una "operación militar dirigida contra un barco estadounidense", dijo el portavoz militar de los hutíes, general de brigada Yahya Sarea, en una declaración televisada. El ataque, detalló, se llevó a cabo con varios misiles antibuque y "el impacto fue preciso y directo".
El portavoz añadió que todos los barcos y buques de guerra estadounidenses y británicos, países participantes en "la agresión", son objetivos hostiles para la fuerza que representa. Por otra parte, confirmó que la navegación comercial en los mares Arábigo y Rojo continuará libremente hacia todos los destinos excepto los "puertos de la Palestina ocupada", que es la forma de referirse a Israel empleada por los hutíes.
Sarea reiteró que las operaciones militares y otros obstáculos para la navegación desde o hacia Israel continuarán en la región hasta que se levante el asedio israelí contra Gaza.
El Mando Central de EE.UU. (CENTCOM) comunicó horas antes que un misil lanzado por los hutíes impactó en el portacontenedores estadounidense Gibraltar Eagle, el cual navega con bandera de las Islas Marshall, sin dañarlo gravemente y sin ocasionar víctimas entre los tripulantes. Además, los militares estadounidenses registraron el lanzamiento fallido de un misil antibuque que debía llegar a las rutas marítimas del sur del mar Rojo, pero cayó en territorio yemení.
Un miembro del Consejo Político Supremo de Ansar Alá, Mohammed Ali al Houthi, recomendó a comienzos de enero a las compañías navieras y a los ministerios de Transporte de terceros países una forma "sencilla y económica" de evitar ataques contra sus embarcaciones cuando se acerquen al estrecho de Mandeb (entre el golfo de Adén y el mar Rojo), y es declarar: "No tenemos ninguna relación con Israel".