Bruselas está llevando a cabo una auditoría de los suministros militares entregados a Kiev, en medio de acusaciones de que varios Estados miembros de la UE han enviado menos armas de las que podrían, informó The Financial Times el martes citando a diplomáticos familiarizados con el asunto.
La verificación está a cargo del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), que tiene previsto presentar sus conclusiones antes de la cumbre de líderes de la UE del 1 de febrero. Según el diario, las conclusiones se basarán en las aportaciones de los miembros del bloque, pero algunos países se resisten a la revisión al mostrarse reacios a facilitar datos.
La decisión de llevar a cabo la auditoría se produce después de que el canciller alemán, Olaf Scholz, pidiera la semana pasada que se calcularan y compararan los suministros militares de los distintos países europeos a Kiev. "Las entregas de armas a Ucrania previstas actualmente por la mayoría de los Estados miembros de la UE son demasiado pequeñas", argumentó. Mientras, se estima que Alemania es, con diferencia, el país de la UE que más armas ha comprometido a Ucrania en términos de valor.
La asistencia militar y financiera que Ucrania recibía de manera regular de sus aliados occidentales ha disminuido drásticamente desde el fracaso de su contraofensiva estival, con un paquete de más de 60.000 millones de dólares de financiación que sigue paralizado debido a divisiones políticas en EE.UU., y otro de más de 50.000 millones de euros (unos 55.000 millones de dólares) aún sin aprobar en la Unión Europea.