El replanteamiento de las exportaciones de gas natural licuado (GNL) por la Administración del presidente estadounidense Joe Biden desafía el sector energético de la Unión Europea, reporta Politico.
Según el medio, esta reevaluación, condicionada por la agenda climática, amenaza con paralizar los planes del bloque para cubrir la demanda de energía, en medio de las restricciones de suministros gasísticos desde Rusia agravadas por las sanciones occidentales.
En este contexto, podrían aparecer nuevos problemas para los Estados miembros, poniendo en peligro incluso los objetivos de seguridad de los aliados occidentales, debido a la intención prioritaria de Washington de disminuir la dependencia de los combustibles fósiles contaminantes del carbono, reseña Politico.
En su comunicado, la asociación comercial Eurogas enfatiza que el aumento de las importaciones de gas de la UE desde EE.UU. contribuyó a la estabilización de los costes energéticos para los consumidores, tras un prolongado periodo de precios récord debido a la reducción de los suministros procedentes de Rusia. En este sentido, Eurogas hace hincapié en el papel crucial que desempeñan las entregas del GNL de Washington para la seguridad energética, debido al posible déficit causado por la inestabilidad geopolítica.
"Por lo tanto, instamos a la administración estadounidense a evitar una prohibición o limitación innecesaria de nuevas exportaciones de GNL a Europa, además de garantizar la entrega de cargamentos a clientes europeos a través de contratos a largo plazo ya acordados", reza la publicación de la asociación.
Sin embargo, un alto funcionario europeo familiarizado con el asunto expresó a Politico que los dirigentes del bloque no entrarían a "especular sobre posibles recortes estadounidenses de la producción o el suministro a la UE". Asimismo, señaló que Washington no ha emitido información oficial sobre el replanteamiento.
"[La reevaluación] empujará a los compradores europeos y asiáticos a ponerse en manos de los cataríes para la próxima generación de suministro", sugiere Leslie Palti-Guzman, responsable de inteligencia de mercado de Synmax, sobre los cambios en los suministros de GNL. "Crea menos certidumbre sobre la próxima generación de suministro" y también sobre las rutas de transporte, agregó.
- Estados Unidos fue el mayor exportador de gas natural licuado (GNL) en 2023, superando a Catar y a Australia en exportaciones del hidrocarburo.
- Las exportaciones estadounidenses aumentaron tras la caída en los flujos de gas por gasoducto desde Rusia, que hasta 2022 era el principal proveedor de hidrocarburos para la Unión Europea.
- Pese al impulso de las autoridades comunitarias para deshacerse de la energía rusa, la UE incrementó en 2023 las importaciones de GNL ruso.
- El pasado noviembre, el periódico Financial Times puso al descubierto que la Unión Europea revende a otras regiones del mundo más de una quinta parte del GNL que importa desde Rusia.
- Ese mismo mes, un estudio elaborado por el profesor Robert Howarth, de la Universidad de Cornell (EE.UU.), reveló que el GNL, particularmente el producido por el país norteamericano, resulta ser más dañino para el medioambiente que la quema de carbón.