La megaoperación de la Policía Federal de Brasil contra el expresidente Jair Bolsonaro ha sacado a la luz pruebas que estrechan el cerco al ultraderechista en la investigación sobre su supuesta vinculación en los ataques contra la sedes de los tres poderes, el 8 de enero de 2023.
Un video incautado por las autoridades, y difundido por O Globo, muestra a Bolsonaro, cuando todavía era presidente, pidiendo a altos cargos del Gobierno "actuar" antes de las elecciones de 2022 para no convertir a Brasil en "una gran guerrilla". La reunión se realizó el 5 de julio, tres meses antes de la primera vuelta de los comicios que se celebraron el 2 de octubre.
"Sabemos que, si reaccionamos después de las elecciones habrá un caos. Brasil se convertirá en una gran guerrilla, en una hoguera. Ahora, ¿alguien tiene alguna duda de que la izquierda, tal como está, ganará las elecciones? No, no sirve de nada si tengo el 80 % de los votos. Ellos ganarán las elecciones", afirmó.
Y continuó: "Saben lo que está pasando. ¿Creen que estos tipos están bromeando? Ah, vamos. No están bromeando. Lo que está en juego es el mayor bien que tenemos y con el que contamos aquí en la tierra, que es la maldita libertad. Más claro, imposible. Vamos a tener que reaccionar".
Pieza clave de la investigación
Según la Policía, en la reunión, Bolsonaro ordenó difundir noticias falsas de cara a las elecciones. La grabación, que se obtuvo en el ordenador del teniente coronel Mauro Cid, el ayudante más cercano de Bolsonaro, ha sido una de las piezas claves para lanzar la megaoperación contra el exmandatario y su círculo más íntimo. En total, se emitieron 33 órdenes de allanamiento e aprehensión y cuatro de detención preventiva.
El exmandatario, que ya fue declarado inelegible políticamente, tuvo que entregar su pasaporte a las autoridades y no puede contactar con los investigados. En la sede de Partido Liberal (PL), con el que el ultraderechista se presentó a las elecciones, los agentes encontraron un borrador de un documento donde se anuncia "la declaración del estado de sitio" y la "garantía del orden público".
La Policía detalló que en el texto se pedía la detención de los jueces Alexandre de Moraes y Gilmar Mendes, así como la del presidente del Senado, Rodrigo Pacheco. Bolsonaro habría solicitado modificar el documento para excluir a Mendes y Pacheco y dejar el de De Moraes, uno de sus principales enemigos.
"La descripción de la reunión del 5 de julio de 2022 revela claramente la disposición de la dinámica golpista, en el ámbito de la más alta dirección del gobierno, expresándose todos los investigados que participaron en ella para validar y ampliar la desinformación masiva y narrativas fraudulentas sobre las elecciones y la justicia electoral", añadió la corporación en una información recogida por la prensa.
Bolsonaro lanzó una intensa campaña para sembrar dudas sobre la fiabilidad del sistema electrónico de voto y, tras los resultados de las elecciones de octubre, que venció Luiz Inacio Lula da Silva, se negó a reconocer su derrota, lo que preparó el escenario para los ataques del 8 de enero que hicieron tambalear la democracia.
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