Philippe Lazzarini, jefe de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés), declaró este jueves a la radio irlandesa RTE que la organización se enfrentará a una crisis de liquidez los próximos meses si no se reanuda la financiación suspendida por varios países.
"Tendremos un flujo de caja negativo a partir de marzo y se acelerará en abril, a menos que se desbloqueen las contribuciones congeladas", expresó Lazzarini. Actualmente, 16 países han suspendido la financiación a la UNRWA tras acusaciones israelíes de que al menos 12 de sus empleados participaron en el ataque perpetrado por el movimiento palestino Hamás el pasado 7 de octubre.
"Mientras tanto, pedimos a los países que han suspendido la contribución a la agencia que revisen la decisión y aporten los fondos necesarios. Si no lo conseguimos, tendremos problemas y nuestra capacidad de cooperación se verá comprometida", señaló el jefe de la agencia.
Por su parte, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, afirmó el 5 de febrero que la privación de la financiación de la organización sería "desproporcionada y peligrosa" porque "hay un amplio reconocimiento de que la UNRWA es un proveedor insustituible de ayuda vital a los palestinos".
A su vez, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, propuso a finales de enero poner fin a la agencia y sustituirla por otras organizaciones. "La UNRWA está totalmente infiltrada por Hamás. Ha estado al servicio de Hamás y sus escuelas, y de muchas otras cosas", aseguró Netanyahu a delegados de la ONU.